Esta investigación revela los posibles vínculos entre Gustavo Alejos Cámbara y dos farmacéuticas emergentes que son contratistas del sistema de Salud de Guatemala.
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Gustavo Alejos Cámbara ha sido uno de los guatemaltecos más poderosos de las últimas décadas. Antes de entregarse a la justicia, a finales de 2015, había amasado una fortuna que él mismo calculó en más de 180 millones de dólares en una entrevista que le dio a la revista Contrapoder.
Este abril de 2021, el Departamento del Tesoro de los Estados Unidos le aplicó a Alejos Cámbara la Ley Magnitsky, con lo cual quedaron congelados los activos que este empresario pudiera tener en ese país y quedó prohibido que ciudadanos y firmas estadounidenses hagan negocios con él y sus empresas.
Pese a ello, en Guatemala, Alejos Cámbara sigue siendo un hombre poderoso. Ligado a empresas que facturan millones al Estado, opera a nivel político, gracias en buena medida a la red que forjó en su fulgurante carrera como contratista del Estado.
Soy502 realizó esta investigación que revela los posibles vínculos entre dos empresas emergentes como contratistas del sistema de salud y Gustavo Alejos Cámbara.
La red Alejos
Gustavo Alejos Cámbara comenzó su carrera como ejecutivo de JI Cohen, uno de los mayores proveedores de insumos hospitalarios del Estado de Guatemala. Posteriormente, Alejos fundó sus propias empresas. La Fiscalía Especial Contra la Impunidad (FECI) lo ha ligado a tres compañías que licitan para el Estado: Droguerías Colón, Sabiapharma y Evopharma. Desde que la primera de ellas aparece en la plataforma de Guatecompras, en 2004, hasta la actualidad, entre las tres han recibido más de Q446 millones en dinero público.
La primera de estas empresas, Droguería Colón, ha recibido Q144 millones. Sabiapharma ha recibido casi Q125 millones y Evopharma, Q177 millones.
Los sucesores de Alejos
Desde que Alejos Cámbara fue acusado y detenido por corrupción, el 28 de diciembre de 2015, es de suponer que los procesos legales hayan complicado la marcha de sus negocios, pero nunca los detuvieron.
Evopharma, por ejemplo, tuvo su mejor año en 2019, cuando llegó a facturar casi Q64 millones, y a partir de entonces entró en declive. Sin embargo, desde entonces, han surgido nuevas compañías farmacéuticas que cuentan con directivos similares a Evopharma, son gestionadas por el mismo notario y tienen direcciones en común.
Al menos dos de estas compañías, Aviv Farmacéutica y Aria Pharmaceutical Group, se han convertido en proveedores importantes del Estado en los últimos años. En poco más de cinco años de operación, estas dos empresas han recibido Q207.6 millones de quetzales, casi la mitad de lo que las otras tres empresas de la red Alejos acumularon en 17 años de operaciones.
¿Vínculos con Evopharma?
Llama la atención que tanto Aviv Farmacéutica, Aria Pharmaceutical Group y Evopharma comparten varias características, como sucede a menudo con empresas que pertenecen al mismo grupo de accionistas o a uno muy similar.
El mismo notario, Diego Santamarina Cárdenas, estructuró y registró las sociedades anónimas Aviv Farmacéutica (en 2014) y Aria Pharmaceutical Group (en 2019). Otra abogada, Claudia Alvarado Lacayo, fue la responsable de esos trámites en el caso de Evopharma, en 2013. Sin embargo, desde hace varios meses ya, en el portal de Guatecompras es el licenciado Santamarina Cárdenas quien aparece como el notario de Evopharma.
Otras coincidencia es que las tres empresas comparten la misma dirección en el complejo de ofi bodegas El Cortijo 2, en la zona 12. Aviv Farmacéutica y Aria Pharmaceutical sí se encuentran en la misma ubicación, la bodega 409, mientras que Evopharma registra en sus patentes de comercio iniciales su dirección en la bodega 310 de ese complejo. Posteriormente, en febrero 2020, Evopharma se mudó al edificio Reforma Montúfar, donde el notario Diego Santa Marina Cárdenas tiene su oficina, en el quinto nivel de la torre B.
Otro indicio es que en el protocolo del abogado Santamarina Cárdenas, existe un contrato de prestación de servicios entre Aviv Farmaceutica y Evopharma, que data de noviembre de 2018 y vigente hasta diciembre de 2021, por medio del cual la primera empresa se compromete a "prestar el servicio de asesoría en administración empresarial y capacitación en productos medicinales biológicos".
Llama la atención que en una entrevista que el medio Plaza Pública le hizo a Gustavo Alejos Jansa, hijo mayor de Alejos Cámbara , indicó que su grupo familiar había salido de Evopharma. Así lo explicó: ¨A mí me gustaba la empresa (Evopharma)¨-cuenta Alejos Jansa- ¨había socios inteligentes, pero se aprovecharon de la situación y nos dejaron fuera. Como yo conocía el mundo farmacéutico pensé hacer mi propia empresa¨, aseguró.
Empresas en Panamá
De la misma manera que decenas de empresarios guatemaltecos, los hermanos Cordón Corzo tienen registradas dos empresas en Panamá. La primera, bajo el nombre de Ulman Group, la abrió Luis Antonio Cordón Corzo, en 2011, con el auxilio del abogado Moisés Galindo Ruiz, quien ha estado ligado a varios casos de militares y ha sido compañero de prisión de Gustavo Alejos Cámbara.
Posteriormente, en junio 2020, los dos hermanos Cordón Corzo incorporaron otra empresa en Panamá: Vertex Pharma. En esta última, aparece como presidente el señor Erwin Oswaldo Trabanino Palma, quien antes de volverse empresario farmacéutico, trabajó como subdirector ejecutivo de la Dirección Financiera del Ministerio de Salud.
¿Pupilos o socios?
Para crear la impresionante red de empresas contratistas del Estado que levantó Gustavo Alejos, es necesario contar con "operadores" en todo el Estado, pero esencialmente: en aquellas instituciones donde se quieran afectar las compras, en la Contraloría General de Cuentas y los tribunales de justicia, en el Congreso y muy importante, en los partidos políticos emergentes, donde se identifica quiénes pueden tener acceso al poder.
Dado que en Guatemala las sociedades anónimas proporcionan un velo de secreto corporativo, es imposible saber quiénes son los accionistas de una compañía. De tal suerte, salvo los datos consignados en esta nota, obtenidos de registros públicos, no se puede conocer la estructura accionaria de las empresas mencionadas. Los socios fundadores que figuran en las escrituras son abogados y particulares entre quienes aparece incluso una persona que actualmente purga condena por trata de personas, por lo que se puede inferir que no deben ser los socios principales ni mayoritarios y posiblemente, se trate incluso de testaferros.
Sin embargo, los datos de los registros sí permiten entrever cómo operaba Alejos para tender sus redes de poder. El señor Trabanino Palma ocupó puestos de importancia en el Ministerio de Salud y otras entidades públicas, así como la señora Silvia Lorena Cordón Corzo, quien fue representante legal de Evopharma, al igual que su hermano, Luis Antonio Cordón Corzo.
Es posible que estos empresarios no sean ya socios de Alejos Cámbara y su familia, como dijo Gustavo Alejos Jansa a Plaza Pública. Pero en todo caso, el entramado de empresas revela que el legado de este personaje en la administración pública está lejos de desvanecerse.
