María Consuelo Porras Argueta fue nombrada por Jimmy Morales como la nueva Fiscal General. De esa manera se convierte en la tercera mujer que tomará las riendas del Ministerio Público (MP).
Ella fue una de las dos candidatas que consiguieron 75 puntos, la nota más alta durante el proceso de elección a cargo de la Comisión de Postulación. Así marcó su paso durante la primera fase de la carrera por el MP.
Porras deberá abandonar su actual puesto de magistrada suplente en la Corte de Constitucionalidad (CC) y trasladarse al edificio ubicado en el Barrio Gerona. Allí ocupará la silla que dejará Thelma Aldana en unas semanas.
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La nueva Fiscal General es conocida por ser devota de la Virgen de Fátima. En sus entrevistas y otras intervenciones públicas nunca olvida hablar de Dios y encomendarse a él.
El MP no es desconocido para Porras, durante ocho años laboró como fiscal en distintas unidades y como jefa de la Fiscalía de Asuntos Constitucionales.
Sin embargo, dos dudas persiguen a la funcionaria. La primera es su inasistencia a distintos foros públicos en los que participaron los otros cinco finalistas. La segunda y quizá la que más llamó la atención es el vínculo militar que tiene gracias a su esposo Gilberto Porres.
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Porres es exsecretario general de la Procuraduría General de la Nación y fue miembro del consejo del MP, pero también perteneció a la promoción 106 de la Escuela Politécnica. Sin embargo, ella ha sostenido que no se ha dejado ni se dejará influir por ninguna persona.
Su experiencia en sistema judicial guatemalteco también ha sido como magistrada de una sala de apelaciones mixta en la que se conocía materia penal y civil. También ejerció ese mismo cargo en una judicatura especializada en niñez y adolescencia en conflicto con la ley.
Una de sus fortalezas durante el proceso de elección fueron sus méritos académicos. Porras posee un doctorado en derecho penal y una maestría en gestión jurisdiccional. Además se ha desempeñado como catedrática universitaria.
