Boca Juniors llegó el miércoles a Madrid, donde el domingo disputará ante River Plate la final de vuelta de la Copa Libertadores. El equipo xeneize abandonó Buenos Aires entre miles de aficionados que acudieron a despedir al equipo, sin embargo hubo un detalle que despertó la polémica.
El autobús, que se abrió camino entre la multitud a duras penas, fue custodiado por Rafael Di Zeo, histórico líder de la barra brava de Boca.
El barra brava de La Doce fue identificado en varios vídeos que fueron publicados en las redes sociales, en los que se le ve controlando la salida del autobús. Algo que generó una gran polémica en el país sudamericano.
Di Zeo no tiene permitido la entrada a los estadios desde abril de 2017, según informó el diario argentino Infobae, aunque sí acude a estadios fuera de Argentina para ver partidos de su equipo.
La ministra de Seguridad de Argentina, Patricia Bullrich, dio la orden que las personas que no tienen derecho de admisión en los estadios argentinos, tengan prohibido también el acceso el domingo al Santiago Bernabéu.
Las críticas llovieron sobre el cuadro xeneize ya que las barras bravas son sin duda los grandes villanos en el futbol sudamericano.