Una niña de 4 años llamada Merthyr Tydfil, originaria de Aberfa, un pueblo cercano a Gales, se convirtió en noticia luego que medios de comunicación dieran a conocer que la pequeña se debate entre la vida y la muerte por una sepsis que contrajo tras probarse unos zapatos con los pies descalzos.
Su madre, Jodie Thomas, de 27 años, llevó a Merthyr a comprar unos zapatos para el próximo ciclo escolar, pero como estamos en pleno verano, la pequeña iba con sandalias, sin calcetas. A las pocas horas de haber ido a la zapatería y de probarse varios pares, la niña comenzó a llorar y luego registró una fuerte fiebre.
De inmediato, los padres llevaron a la menor al hospital, en donde le fue diagnosticado septicemia, la cual se le había extendido por una de sus piernas y por lo tanto, necesitaban operarla de emergencia.
Afortunadamente, la cirugía no fue necesaria y los médicos lograron extraer la pus de su pierna, aunque aún sigue luchando con antibióticos para erradicar por completo la infección.
Los doctores le explicaron que la niña pudo contraer la enfermedad por haberse cortado o pellizcado con alguno de los zapatos que se probó.
“Normalmente se pondría calcetas, pero es verano, llevaba sandalias. Los zapatos que le gustaron se los habían probado otras niñas y así se contagió. A los padres que hacen las compras, les aconsejo que se lleven un par de calcetines y siempre tengan mucho cuidado con sus hijos, porque no nos podemos despistar”, indicó la madre a un medio local.