Balwinder Sahani, un empresario indio de bienes raíces radicado en Dubái, ha gastado lo que es considerado una fortuna por cualquier ciudadano común del mundo por una matrícula de circulación, a menos que pertenezca al grupo de millonarios del desértico país árabe.
Sahani desembolsó 33 millones en dírhams, la moneda emiratí, equivalentes a ocho millones de euros, (alrededor de 80 millones de quetzales) para obtener la matrícula con un solo dígito, el 5.
- Mira más excentricidades de Dubái
Carros de lujo abandonados en las calles muestran la crisis de Dubáihttps://t.co/DzrV7Z43OD pic.twitter.com/T1dJWsuX7r
El magnate de origen indio afirmó, que si la subasta hubiese subido hasta "50 o incluso 100 millones de euros”, igual los hubiera pagado.
Este propietario de una empresa inmobiliaria internacional, explicó haber comprado el año pasado la matrícula número nueve por 6 millones de euros (Q60 millones aproximadamente).
El excéntrico empresario afirmó que este tipo de adquisiciones son su "pasión" y que pondría la número cinco en "uno de sus Rolls Royce".
- INSÓLITO:
Insólito. En Dubái, un mendigo acepta limosna con tarjeta de crédito. http://t.co/j8bGHlMTPN pic.twitter.com/EMPzFLtTzT
La Autoridad de Carreteras y del Transporte de Dubái organiza regularmente subastas de matrículas, que atraen a millonarios ávidos de darse publicidad.
Más de 300 personas participaron en la subasta celebrada el sábado recién pasado, en una actividad donde pusieron a la venta 80 matrículas.
