Tal vez sea una incógnita quién terminará sentado en el Trono de Hierro, pero no hay duda de que Game of Thrones volvió a los Emmy con ganas de arrasar.
Este jueves, la serie de HBO consiguió 22 nominaciones a dichos premios, los más importante de la televisión de Estados Unidos.
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La fantasía medieval sobre familias nobles que se disputan el control de los siete reinos es ya el programa de ficción más galardonado en la historia de los Emmy. Y tras perderse la pasada edición de los premios, ya que salió al aire después de la fecha de corte, vuelve a competir en la categoría de mejor drama, que ganó en 2015 y 2016.
Lena Headey, Nikolaj Coster-Waldau, Peter Dinklage y Diana Rigg fueron nominados en las categorías de actuación, mientras que Kit Harington y Emilia Clarke quedaron fuera.
La competencia
La serie distópica The Handmaid's Tale, que consiguió 20 nominaciones, defenderá el título de mejor drama.
Esta producción ha robado mucha atención al centrarse en un régimen teocrático en medio de las protestas de defensores de los derechos de la mujer, las cuales surgen tras la nominación de un juez ultraconservador a la Corte Suprema por parte del presidente Donald Trump.
Por otro lado, el programa humorístico Saturday Night Live recibió 21 nominaciones e impuso un récord de 252 en toda su historia. Le sigue Game of Thrones con 129, muchas de ellas en categorías técnicas.
Asimismo, los Emmy dieron la bienvenida a ganadores del Óscar, como la española Penélope Cruz y John Legend, al igual que a estrellas de la música de la talla del puertorriqueño Ricky Martin y Sara Bareilles.
Cruz, Martin y el venezolano Edgar Ramírez fueron nominados por la segunda temporada de American Crime Story, que gira en torno al asesinato del diseñador Gianni Versace a manos del asesino en serie Andrew Cunanan, al cual encarna Darren Criss, también postulado.