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Carlo Acutis, el joven que murió en 2006 y es conocido como el "ciber-apóstol de la Eucaristía", fue beatificado este sábado por la Iglesia católica y su historia ha generado diversas reacciones.
Imágenes revelaron que el cuerpo de Acutis continúa en perfecto después de 14 años de haber sido enterrado, ante el asombro de millones de católicos en el mundo.
Muchos aspectos de la vida del joven inglés que murió de leucemia aún son desconocidos, pero su biógrafo, Nicola Gori, quien también fue postulador de la beatificación de Acutis, reveló algunos detalles.
Nicola Gori es autor de dos libros acerca del beato: “Mi autopista al Cielo” y “Carlo Acutis: un genio de la informática en el Cielo”, a través de los cuales sus fieles pueden conocer más detalles de su corta pero profunda vida.
Gori conversó con el medio argentino, Infobae, y reveló algunos detalles de Acutis, quien actualmente moviliza a miles de personas en el mundo, que le rezan a través de una conexión de streaming que muestra su tumba en directo.
En "'Mi autopista al cielo’, sus compañeros de clase, que ya conocían su fe, su generosidad y su amabilidad, quisieron hacerle un homenaje: algo que quedara para siempre en el recuerdo de todas aquellas personas que lo conocieron", dijo Gori.
Asimismo, el biógrafo resaltó que el joven ayudaba a gente muy necesitada, sin que su familia supiera sobre sus acciones.
“Cuando falleció, su madre se sorprendió por la gran cantidad de gente que asistió a la misa en su memoria, ya que en su mayoría eran personas de muy bajos recursos, a quienes ella no conocía", narró.
Carlo ayudaba en secreto. Su familia le daba una pequeña suma de dinero semanalmente. En vez de gastarlo, lo llevaba a la Mesa de los Pobres, en Milán, donde vivía con sus padres, y compraba colchones para la gente que vivía en las calles.
Todas esas acciones a una edad tan temprana, de las que ni siquiera su madre se había enterado cuando estaba vivo, encendieron una curiosidad increíble alrededor de su figura.
"Era un niño muy particular, que amaba la Eucaristía, la oración y a la Virgen. Por eso, luego de su muerte, muchísima gente empezó a rezarle. La Diócesis de Milán abrió el proceso de beatificación. Así, empezó el reconocimiento de Carlo”, contó el biógrafo.
Antonia Acutis, la madre del joven no conocía muchas acciones de Carlo, pero las fue descubriendo gracias al trabajo de Gori, que además llevó la postulación de beatificación a Roma.
“El dolor de su madre fue terrible. Nadie iba a imaginarse que iba a morir repentinamente y en una semana. Un día, se empezó a sentir mal y le dijeron que era solo una gripe. Pero a los tres días, le dijeron que estaba enfermo de leucemia", contó.
En unos días, Antonia perdió a su primer y único hijo, pero antes de morir, Carlo le anticipó que volvería a dar a luz. Y así fue: en 2010, llegaron los mellizos Francesca y Michele.
La mujer se preguntaba por qué su hijo había muerto tan pronto. Por el inmenso amor a Dios que tenía su hijo, se imaginaba que iba a ser sacerdote. Pero cuando murió, su mundo se vino abajo. Pero, después comprendió que Dios tenía otro proyecto para su hijo.
Por eso, Antonia también empezó a difundir la imagen y la obra de Carlo, apenas comprendió el mensaje tan importante que este adolescente le podía llevar al mundo de hoy.
Carlo siempre decía que era testigo de la presencia de Dios, especialmente, en las redes sociales. Por eso, logró llegar a los adolescentes, porque era un joven que sabía manejar la informática a la perfección.
A pesar de que el milagro de un niño que sanó de una enfermedad grave en Brasil fue uno de los motivos más fuertes para su beatificación, el postulador expresa que existen otros milagros que se le atribuyen a Carlo.
“Hay otros supuestos milagros, pero ahora eligieron el milagro de Matheus porque era tan evidente y tan fuerte. Sin embargo, hay muchos otros. Cada día, aparecen más personas hablando de nuevos milagros. Dejo en claro que, para que pueda ser canonizado tiene que hacer un milagro a partir de ahora, que ya fue beatificado", indicó Gori.
La beatificación de Carlo Acutis es un paso hacia su santificación. "Ahora, tenemos que esperar un milagro y que la Congregación de las Causas de los Santos lo reconozca cómo auténtico. Luego, hacemos otro proceso y, si el Papa Francisco lo aprueba, al igual que los Cardenales y los teólogos, entre otros, se convertirá en Santo”, explicó el biógrafo.
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