Esta mañana de nuevo se cubrió de luto la comunidad de Semuy II, en el Estor, Izabal. Luego de que uno de los supuestos responsables del ataque que el Gobierno califica como "emboscada", se habría suicidado.
El comunitario, identificado como Agustín Chub Chub, fue encontrado la mañana de este domingo en su vivienda, la cual ha estado prácticamente abandonada, ya que el exmilitar residía en otro lugar.
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Según medios locales, los lugareños comentan que su supuesto suicidio fue consecuencia de la exposición que se hizo de sus datos, en donde se le acusó de haber sido uno de los responsables de haber asesinado a tres militares y herir a otros, en un confuso incidente el pasado 3 de septiembre.
El cuerpo de Chub Chub fue ubicado por su esposa Isabel Pérez Cucul, quien aseguró que salió a visitar a su cuñado y cuando regresó, una media hora después, lo encontró colgando.
El cuerpo del exsoldado fue llevado a la Alcaldía Auxiliar de la aldea, debido a que los familiares se negaron a que fuera trasladado al Instituto Nacional de Ciencias Forenses.
Luego de su muerte, tres menores quedan en orfandad. La organización Mujeres Transformando el Mundo lamentaron la muerte del comunitario y responsabilizan a las autoridades del Gobierno, pues consideran que el Estado de Sitio y la publicación de las fotografías de los supuestos responsables, es un acto de intimidación y represión.
El problema empezó el pasado 3 de septiembre en un confuso incidente, en donde que involucra a una brigada de militares. Según el Gobierno hubo una emboscada, pero los comunitarios han explicado que solo preguntaban sobre la presencia de los soldados en el lugar, ya que muchos de los que viven allí, son víctimas del conflicto armado interno.
Hasta el momento se desconoce quién inició el fuego, pero hubo tres soldados asesinados y dos comunitarios con graves heridas, entre ellos una mujer.
Extraña escena
Aunque se habla de suicidio, imágenes que circulan en las redes sociales del cuerpo colgado de Chub Chub reflejan una escena diferente. El cuello del comunitario está presionado con un lazo que habría sujetado por el lado izquierdo. La puerta no estaba atrancada, por lo que cualquier hubiera podido entrar e impedir el hecho.
A la par de Chub, un banco blanco que no se cayó, frente a él unas bases de madera. Los pies del exsoldado están al ras del suelo, donde solo poniéndose de puntillas habría evitado su muerte.
El banco está en perfecta posición, como si Chub no hubiera forcejeado al faltarle el aire como reacción instintiva del cuerpo.
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