Durante el juicio que se celebró este 26 de abril se mostró el testimonio de una oficial de policía que asistió una llamada desde el hogar de la pareja por violencia doméstica.
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La oficial de policía de Los Ángeles, Melissa Saenz, dijo que respondió a una llamada en 2016 por una denuncia de violencia doméstica en el penthouse donde vivían Johnny Depp y Amber Heard.
La agente declaró que no vio indicios de algún altercado violento en el lugar luego de revisarlo, tampoco vio heridas o golpes en Amber Heard, además afirmó que le hizo preguntas a la actriz que no contestó y tras una inspección decidió retirarse y le dejó una tarjeta con sus datos para que volviera a llamar si cambiaba de parecer.
"Los agentes están entrenados para reconocer violencia doméstica aún si la víctima no habla, muchas veces tienen miedo a su victimario, por ello los agentes deben identificar otras señales", explicó un especialista legal al ser consultado por el programa Court TV, afirmando que ese testigo podría ser una gran ventaja para Depp, pues la palabra de un agente es muy tomada en cuenta, además de que no tiene ninguna relación familiar o de amistad con el actor.
"Las víctimas no cooperan por diferentes razones, entre ellas miedo, cuando se trata de violencia doméstica las personas no cooperan, es la evidencia la más importante para los testigos", agregó el especialista.
La declaración del agente fue tomada el 31 de marzo de 2021 y fue presentada en esta ocasión. Este fue el último testimonio del día.
