La Oficina del Alto Comisionado de la Organización de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos en Guatemala se pronunció para dar su postura ante los últimos acontecimientos que han puesto al país en el panorama mundial.
La entidad reconoce la cohesión de varios sectores de la sociedad civil para presionar a los diputados a dar marcha atrás a las reformas al Código Penal que vulneraban el sistema judicial guatemalteco.
“Esa cohesión evidencia un sentimiento común en dirección de la lucha contra la impunidad y la corrupción, y constituye una oportunidad para avanzar, con el compromiso colectivo, en la construcción y consolidación de los avances alcanzados por el país en los últimos años”, destaca el comunicado.
Sobre las manifestaciones pacíficas que se han suscitado en el país, este ente resalta que: “Destaca el papel de distintos sectores, organizaciones sociales y medios de comunicación para favorecer la auditoría y rendición de cuentas de las instituciones del Estado”.
Esta representación de los Derechos Humanos de las Naciones Unidas agregó que está comprometida a brindar acompañamiento, asesoría y asistencia técnica al Estado y a la sociedad Civil ante los próximos eventos que se avecinan en Guatemala.