No todo brilló para el Barcelona dentro de la cancha tras clasificar a los cuartos de final de la Champions League.
El equipo culé pasó momentos de tensión debido a la dura patada que recibió Lionel Messi durante el encuentro de este sábado, el cual terminó con una victoria, 3-1, ante el Napoli.
El astro argentino quedó "tocado" de la pierna derecha, acción que derivó en penal y en el tercer gol del partido.
“Le he visto bastante bien, tuvo un golpe muy fuerte y hay que estar pendiente de la evolución, hay que tratarlo, pero no creo que haya problema”, dijo Setién al terminar el encuentro.
La acción llegó a los 40 minutos del primer tiempo, cuando Kalidou Koulibaly intentó salir desde el fondo para el Napoli y el argentino se tiró a la grama para intentar quitarle la pelota desde atrás.
El senegalés terminó pegándole una dura patada, dentro del área, y ambos quedaron tendidos.
La preocupación por el estado físico de La Pulga creció debido a que permaneció en el suelo por varios minutos, algo nada común en él. Incluso, cedió la ejecución del penal al uruguayo, Luis Suárez, quien se encargó de marcar el 3-0 parcial.
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Para tranquilidad de los seguidores y el equipo, fuentes del Barcelona confirmaron al diario Marca, de España, que “Lio no tiene ninguna lesión importante”. No obstante, precisaron que el delantero tiene el pie izquierdo bastante inflamado por el golpe, pero es algo que será tratado con hielo y antiinflamatorios.
Por el momento, no se prevé ningún tipo de estudio médico complementario, por lo que no habría problemas para que el capitán Blaugrana juegue ante el Bayern Munich, el próximo viernes.
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