La zona 4 de la ciudad de Guatemala sigue creciendo en comercios, centros de entretenimiento y en apartamentos.
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Jorge y Diana son pareja. Él tiene 29 años y ella 30. Él posee un trabajo en la industria creativa y labora para una empresa estadounidense. Ella tiene una maestría en Marketing Digital y tiene un puesto importante en una agencia de publicidad. Ambos residen en Guatemala y tienen un gato en su vivienda.
Su meta es trascender y, aunque han conversado acerca de los hijos, aún no deciden si los tendrán. Mientras tanto, los dos se dedican a sus carreras. Actualmente, residen en un apartamento y encajan en el perfil de los jóvenes guatemaltecos que buscan una vivienda en la Ciudad de Guatemala.
Muchas de estas parejas jóvenes han puesto su vista en la zona 4 de la capital. La cual ha logrado un crecimiento en empresas, recreación y vivienda en los últimos años.
El crecimiento en zona 4
Un estudio realizado por el Central American Business Intelligence (CABI) reveló que la zona 4 de la Ciudad de Guatemala ha recibido la mayor cantidad de residentes provenientes de municipios y zonas aledañas.
Según el CABI, en los últimos 11 años, el crecimiento de personas que buscan habitar esta área ha sido de 677%.
El estudio detalla, además, que este grupo de la población podría pagar de U$1,850 y U$2,500 en adelante por metro cuadrado construido en zona 4.
El estudio enfatiza que las generaciones Z (los nacidos entre 1994 y 2010) y Millennial (nacidos entre 1981 y 1993) son las que ven atractivo el crecimiento de la zona. Charless Hass, gerente de CABI, explicó que por cada baby boomer (nacidos entre 1949 y 1968) hay 6 personas de la generación Z interesadas en habitar la zona 4.
Este grupo etario se está decantando por la vivienda vertical. Y esto se debe a que, en su mayoría, son personas con estudios académicos en el grado de licenciatura, condición que supone un ingreso por encima de la media salarial y quienes representan el 40% del total de jóvenes que buscan vivienda en esa zona.
Otro tanto de esa población (35%), que tienen interés en habitar la zona 4, son jóvenes que tienen culminado el nivel medio, educación básica y diversificado, y muy a pesar de sus salarios, buscan lugares menos complejos donde vivir. Tan solo el 10% cuenta con estudios de posgrado.
No obstante, otra cualidad que les distingue, aún más que el grado académico, es la soltería. El 60% de las personas que buscan habitar la zona 4 está soltero, un 20% está casado y otro 20% está en unión de hecho.
Por otro lado, este grupo de la población busca cercanía para la convivencia y suplir sus necesidades sin que implique el desplazamiento a lugares mucho más lejanos. De hecho, la pareja que narró a Soy502 la forma en que gira su vida explicó que en el edificio de apartamentos donde residen, pronto empezará a prestar sus servicios un reconocido restaurante.
¿Y los hijos?
El departamento de Guatemala cuenta con espacios habitables para familias, siguiendo el modelo familiar de padre, madre e hijos. Entre ellas, figuran las zonas 6, 15, 16, y 18.
Estas se distinguen por los espacios para el entretenimiento familiar, la construcción o cercanía con colegios y centros de estudio superiores.
En cambio, el crecimiento de la zona 4 está determinado por jóvenes o esa población que ha decidido aplazar la maternidad y paternidad, o en todo caso, no llegar a ser padres de familia.
De modo que, el estudio de CABI detalla que los jóvenes que buscan vivienda vertical no tienen hijos. Este porcentaje está concentrado en el 57%; en tanto, el 21% tiene solo un hijo, el 15% tiene dos hijos, el 5% tiene tres hijos y apenas el 2% tiene cuatro hijos en su hogar.
En ese estudio también se detalla que el 30% de las personas que está buscando vivienda pretende habitar en solitario, seguido por el 24% donde el hogar está compuesto por dos personas, en el 16% se ubican quienes habitan en compañía de tres ocupantes de la casa o apartamento, y así va disminuyendo hasta llegar al 9% donde habitan cinco.
Los nuevos vecinos de la zona 4
Según el estudio, los nuevos vecinos de la zona 4 están interesados en una vivienda que esté equipada y se ajuste a las necesidades. Los jóvenes se sienten más cómodos si en el edificio de apartamentos hay agua caliente y lavadora, esta última responde a las necesidades por espacio y por actividad a la que se dediquen.
En la mayoría de zonas "boom", el apartamento es la opción que buscan las juventudes migrantes internas, dice el estudio. Y la zona 4 es esa área que las está recibiendo. El 70% de la población busca un apartamento en zona 4, seguido de la zona 11, lugar donde quiere vivir el 40% de los jóvenes.
Las zonas "boom" son los municipios aledaños al departamento de Guatemala, de donde, el estudio de CABI detalla, son provenientes los que buscan habitar zona 4. De esos grupos migrantes, el 25.5% emigró de Mixco hacia la ciudad, el 17.2% es proveniente de Villa Nueva y así se va degradando la tabla porcentual de migraciones internas.
La urbanización en zona 4 implica mucha más gente moviéndose y esto atrae comercio en una calle principal y se constituye en una zona céntrica para los jóvenes guatemaltecos.
Los proyectos en zona 4
William Ochaita, director financiero de SUR Desarrollos, y quien tendrá a su cargo la construcción de la torre dos del proyecto Modra II y III, explicó que el crecimiento de zona 4 es evidente, que el precio del terreno está equiparando los precios que se han manejado en las zonas 15 y 16.
Sin embargo, la construcción de Modra supone no solamente cercanía, sino también oportunidad de negocios en el área. Así, detalló que todo el comercio que ha ido en repunte en la zona permite una experiencia diferente al visitante del país.
Y que, en lo sucesivo, podría representar aún más crecimiento y el ingreso de nuevas empresas con el fin de dinamizar la economía y generar comodidad para los que residen en esas áreas.
Ochaita recordó que uno de los primeros edificios se construyó en el espacio donde otrora una tienda de esquina ofrecía sus productos a los residentes del lugar; hoy es uno de los grandes edificios del área.
Y la demanda es tal que en la torre Modra II y III, de la cual se realizó recientemente el evento de colocación de primera piedra, ya tiene agotados los apartamentos de una habitación, espacios construidos de 38 m² para arriba y el cual cuenta con un baño, un área social integrada, balcón, lavandería con pila, cocina integrada y closet.
Para Hass, de CABI, el crecimiento en zona 4, si bien no se puede asegurar, sí puede constituirse en un estudio que motive la adquisición de vivienda vertical en la zona. De ahí que la vivienda vertical se está haciendo por la necesidad de los potenciales compradores de estar centralizados.
La zona 4 está catalogada como una zona de casas, dice el estudio. En esa área se ven viviendas con personas que tienen mejores ingresos, con viviendas unifamiliares, zonas suburbanas, espacios con alto nivel de amenidades y también cuenta con colegios que ofrecen alto nivel académico.
