La Contraloría General de Cuentas (CGC) detectó varios de los cupones para alimentos que el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación (MAGA) debía entregarle en 2018 a los agricultores afectados por la sequía fueron a parar a manos de empleados públicos.
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Durante una citación con la bancada Unidad Nacional de la Esperanza (UNE), el auditor de la CGC, Francisco Arriaga, señaló que 6 mil 513 beneficiarios de este programa social trabajan para el gobierno central o para alguna municipalidad.
Además, otros 3 mil 42 beneficiarios tienen un empleo formal en el sector privado y 3 mil 638 personas tienen una pensión del Estado.
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El auditor aclaró que no han verificado a todos los beneficiarios del MAGA, por lo que solo han tomado una muestra en la que también han aparecido 599 muertos que recibieron cupones.
Aunque el ministro Mario Méndez estuvo en la reunión, no se refirió a estas anomalías.
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Cada familia beneficiaria recibió 2 cupones, cada uno por 250 quetzales, para canjearlos por alimentos. En total, lo entregado de forma anómala ronda los 6 millones 896 mil quetzales.
Hasta el momento la CGC no ha presentado alguna denuncia penal, pero la auditoría aún está en proceso.