Un estudio publicado en el número de marzo de la revista Nature Medicine descarta que la pandemia de COVID-19 se haya originado en un laboratorio de ingeniería genética, como aseguran muchas teorías de la conspiración que circulan en Internet.
Esto significa que la epidemia de este nuevo tipo de neumonía, primero reportada en China, no proviene de una manipulación humana del virus causante de la enfermedad, identificado por la comunidad científica como el SARS-CoV-2.
“Los datos genéticos muestran de forma irrefutable que el SARS-CoV-2 no se deriva de la espina dorsal de ningún otro virus usado previamente”, afirma la investigación.
Los autores proponen, en cambio, dos escenarios posibles para explicar el origen del virus:
- La selección natural en un animal anfitrión antes de la transferencia de la enfermedad infecciosa a humanos (transferencia zoonótica)
- La selección natural en humanos después de dicha transferencia.
En otras palabras, según esta investigación el origen de la enfermedad sería un proceso natural, no uno hecho por el hombre.
El estudio fue realizado por cinco científicos, encabezados por el doctor Kristian G. Andersen, el director de Genómica de Enfermedades Infecciosas en el centro de investigación Scripps, en California.
Los expertos compararon el gen de una proteína clave en el proceso infeccioso que se encuentra en la envoltura externa del virus. Esta proteína, llamada “spike” o “espiga” es la que el virus necesita para ingresar a las células humanas.
El estudio de las moléculas involucradas en el proceso de infección fue el que llevó al grupo liderado por Andersen a rechazar la posibilidad de que el virus SARS-CoV-2 haya sido creado en un laboratorio.
El estudio concluye que los datos obtenidos hasta el momento no permiten determinar el origen preciso del virus. Sin embargo, profundizar en este tipo de investigación es clave para monitorear las enfermedades infecciosas, advierte el equipo de Andersen.
Andersen es un científico graduado de la Universidad de Cambridge, conocido por sus estudios sobre enfermedades como el ébola o el zika.