El aislamiento social ha hecho que la rutina cambie totalmente para muchos.
Cuando podíamos salir dábamos por sentado muchas actividades que ahora son un privilegio.
Algunos trabajadores deben hacer sus actividades desde casa, los pequeños estudian a distancia.
Las primeras semanas fueron caóticas, pero muchos ya han comenzado a acostumbrarse a su nueva rutina.
Para ve el lado positivo al aislamiento físico, el sitio de noticias MSN enumeró las cosas que muchos, aunque no lo admitan no extrañan de la rutina previa a la pandemia:
Trabajar con traje formal:
El nuevo uniforme de trabajo son las pijamas o la ropa de estar en la casa.
Tener que dejar a tu mascota sola:
Ahora tus pequeños están más felices que nunca de tenerte todo el día junto a ellos.
Tener prisa:
Sin poder avanzar debido a las congestionadas calles y centros comerciales.
Sentirte mal por no ir al gimnasio:
La actividad física que siempre posponías.
Días lluviosos:
Cuando estás en casa o en el bosque la lluvia es relajante, pero en la ciudad y con prisa todo es más difícil en días de lluvia.
Zapatos que hacen daño:
Los formales, los de trabajo o los deportivos. Ahora las "chanclas" son lo mejor para tu comodidad.
Encontrar parqueo:
Un verdadero reto.
Los conductores preguntones:
Los que dan recomendaciones, los que hacen preguntas incómodas, los conocedores de política o los que ni siquiera daban los buenos días.
Las colas para el transporte público:
Avanzar era una locura, también las veces que fuiste asaltado o viviste una mala experiencia.
Los olores:
Ya fuera en el trabajo o en un lugar abarrotado.
El compañero de la oficina:
Quien llevaba refacción olorosa.
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