Sergio Ramos fue abucheado durante el partido que el Real Madrid ganó 2-0 al Valladolid, en la jornada 11 de la Liga Española.
Es el capitán y uno de los referentes de la institución, pero no se salvó de las muestras de molestia de la afición en el estadio Santiago Bernabéu.
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De hecho, fue de los más perseguidos por los madridistas, aunque marcó el segundo gol por la vía del penal.
Ramos salió al pasó y respondió a la demanda de los seguidores blancos.
"Entiendo el sentir del aficionado que recae sobre los jugadores que más años llevamos. Yo orgulloso de que me carguen la mochila de piedras y a tirar al frente", aseguró.
Además, agregó: "Tenemos que levantarnos, entendemos el sentir de la afición y los silbidos y todo. Nosotros tenemos que cambiar eso, parece que tras el gol el Bernabeú se volvía a levantar".
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