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Desde hace dos años inició la clínica Piel a Piel como un segundo proyecto del área de quemaduras pediátricas del Hospital Roosevelt. Su labor principal es sanar heridas y borrar huellas en todos aquellos menores que han sido afectados por una quemadura.
En este consultorio atienden a pequeños de 0 meses a 18 años totalmente gratis, lo único que se le pide a los padres es un aporte simbólico para los materiales que necesitan.
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"Gracias a donaciones del Patronato del Hospital Roosevelt, la Fundación Pantaleón y la Fundación del Niño Quemado, es que podemos obtener los materiales, pero siempre le pedimos un aporte a los padres y eso nos ayuda a incentivarlos para crear un sentido de pertenencia", explica la pediatra de la clínica, Itala Chang.
En el área de quemaduras de dicho nosocomio se tiene a pacientes agudos, es decir que acaban de sufrir el accidente "dependiendo de la gravedad los trasladamos a la unidad de cuidados críticos... Aquí contamos con 10 camillas y un aislamiento", indicó la doctora Débora Monzón.
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En Piel a Piel se cuenta con diversas secciones: área médica, curaciones, fisioterapia, presoterapia (creación de prendas), psicológica y trabajo social. Según cifras de la clínica, en 2016 se atendió en sus diversas áreas a 5 mil 270 menores.
El 75 % de las quemaduras que atienden son por líquidos calientes, le siguen las provocadas por la pólvora y por último las eléctricas.
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Antony Tomas Coz es uno de los pequeños que se encuentra rehabilitándose en la Piel a Piel. Él tiene cinco años y hace dos meses sufrió quemaduras en todo su cuerpo por un corto circuito en la habitación donde dormía en su casa de San Lucas Tolimán, Sololá.
"Me metí por otra puerta de la habitación para sacarlo... En el hospital me dijeron que sus manos estaban muy delicadas y nos trasfirieron a la capital", contó su mamá, Joanna Coz.
A pesar de la gravedad, Antony se ha recuperado por su disciplina con los ejercicios y terapias.
¿Cómo ayudarlos?
Actualmente ellos lanzaron su campaña de donación de toallas tamaño baño color blanco, ya que por todas las curaciones que realizan utilizan al menos 15 diarias.
"Si pueden ser blancas porque así tenemos un tono neutro, ya que por las curaciones a veces se manchan y nos es factible ver el tipo de secreción", indicó la administradora de la clínica, Lourdes Montenegro.
