En tiempos actuales, en los que el fútbol además de un deporte, genera grandes rivalidades que se acentúan con el objetivo ganarlo todo, es difícil ver gestos que pasen los límites del juego limpio o "fair play" y nos demuestren que dentro de este deporte es posible dejar de competir por un momento y darle una mano a los rivales.
Los aficionados que llegaron al estadio a ver el juego entre el Al Nahdha y el Al Ittihad del campeonato de fútbol de Arabia Saudí, no olvidarán tan fácil lo sucedido dentro del terreno de juego, pues el portero del Al Nahdha, llamado Nahdha Taisir Al Antaif, tomó un balón y antes de despejarlo notó que las cintas de sus zapatos de habían soltado, pero el no fue el único en notarlo, el brasileño Jobson, del equipo rival también se dio cuenta y se acercó al guardameta para ayudarlo a atar las cintas de sus zapatos.
Jobson sin pensarlo dos veces pidió el balón y consciente que el guardameta no había estado perdiendo el tiempo, cobró el tiro libre lanzando la pelota hacia afuera, para no meter en problemas a Nahdha Taisir. Los aficionados asistentes aplaudieron la acción que demostró que en el fútbol actual aún hay tiempo para dejar de lado las rivalidades y demostrar el lado más humano de cada jugador.
