El París Saint-Germain y el Mónaco llegaron a un acuerdo para el traspaso del joven delantero francés de 18 años Kylian Mbappé, según anunciaron este domingo varios medios, que cifran la operación en 180 millones de euros, primas incluidas.
Cuando el fichaje se concrete, el club parisino habrá gastado en la actual ventana de traspasos una auténtica fortuna, unos 400 millones de euros, pues adquirió al brasileño Neymar a cambio de pagar 222 millones al FC Barcelona.
Pocos clubes pueden jactarse de haber sido autores del traspaso más alto de la historia y ninguno, salvo el PSG, de haber adquirido a los dos futbolistas más caros del planeta en un mismo verano (boreal).
Las emisoras de radio France Info y RMC hicieron referencia a una operación que se cerraría por 180 millones de euros, primas incluidas, lo que convertiría al internacional francés en el segundo jugador más caro de la historia tras el brasileño Neymar.
Escenario también refrendado por el diario L'Equipe, que en sus páginas de este domingo explicaba que ambos clubes "han llegado a un acuerdo sobre una cesión al equipo de París de Mbappé. Cesión que incluye una opción de compra".
La cesión le permitiría al PSG no exponerse a sanciones de la UEFA por incumplir el fair-play financiero, según el cual una club no puede gastar más dinero del que ingresa independientemente del capital de su propietario.
La UEFA, al acecho
En caso de infracción en este punto, las sanciones pueden ir desde una simple advertencia a la prohibición de participar en torneos organizados por la UEFA, como por ejemplo la Liga de Campeones.
En 2014, clubes como el propio PSG o el Mánchester City fueron sancionados por este motivo.
Con Mbappé, la entidad parisina podría alinear, junto a Neymar y Edinson Cavani, a uno de los tridentes más peligrosos del continente.
Las cantidades multillonarias gastadas por el PSG ponen de relieve dos cosas: la primera, que la inflación en la adquisición de futbolistas es imparable. Las sumas que ahora se pagan, espoleadas por unos derechos televisivos también astronómicos, han cambiado para siempre el mercado.
La segunda, que el club parisino ha decido en estos dos meses alterar su historia (también para siempre) tras una temporada, la pasada, en la que perdió el título de liga ante el Mónaco y cayó en los octavos de final de la Champions tras perder dolorosamente contra el Barcelona por 6-1 después de desperdiciar una ventaja de cuatro goles conseguida en el partido de ida.
Ambos casos supusieron un punto de inflexión y en la actual ventana de fichajes, los parisinos han adquirido al lateral español Yuri Berchiche, al lateral brasileño Dani Alves, a Neymar y ahora a Mbappé.
Entorno protector
En 44 partidos con el Mónaco en la anterior campaña, el ariete galo anotó 26 goles, algunos de los cuales fueron firmados en los importantes compromisos del equipo en Champions.
En esta competición Mbappé vio puerta ante el Mánchester City (octavos), el Borussia de Dortmund (cuartos) y la Juventus (semifinales). Además, pese a su corta edad, cuanta ya con cuatro convocatorias con la selección absoluta.
El joven prodigio siempre anunció maneras. Nike ya se fijó en él antes de que lo hiciera el Mónaco y con solo 14 años el Rea Madrid, pendiente de su evolución, lo invitó a visitar las instalaciones del club y a conocer a su ídolo, Cristiano Ronaldo.
Pero el delantero, siempre protegido y bien dirigido por su entorno, eligió el Mónaco -que le aseguró disputar minutos- para crecer como futbolista.
A menos de un año para el Mundial 2018, Mbappé ha elegido cambiar de equipo pero continuar en Francia, regresando a la región en la que nació.
