El precio del barril del petróleo cerró por debajo de los 100 dólares. El temor de los inversionistas es una inminente recesión económica que provocará baja demanda.
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El crudo del West Texas Intermediate (WTI) para agosto cedió 8.23%, a 99.50 dólares, un mínimo desde el 11 de mayo en Nueva York.
"Evidentemente la trayectoria del petróleo se revirtió", constató Phil Flynn, de Price Futures Group, en diálogo con la AFP, tras la fuerte alza que tuvo el oro negro desde que el inicio de la guerra en Ucrania en febrero.
"Hay mucha preocupación sobre una eventual recesión y sobre el hecho de que China haya impuesto test de covid masivos", añadió.
El Ministerio de Salud chino dio cuenta este martes de 335 nuevos casos positivos de coronavirus en el país, y las autoridades lanzaron una nueva serie de test obligatorios en la mayoría de los distritos de Shanghái.
"Eso despierta inquietud por el hecho de que la demanda de petróleo de China podría debilitarse", indicó Flynn.
Bajará demanda de petróleo
Para Ipek Ozkardeskaya, analista de Swissquote, "los temores de recesión reducen las perspectivas para la demanda de petróleo y hacen bajar los precios".
Al volver a menos de 100 dólares, el crudo cae por debajo de una importante "cota psicológica". El analista evoca la posibilidad de una caída de precios hasta los 85 dólares por barril.
En un escenario de recesión, los analistas de Citi prevén incluso que el barril caiga a 65 dólares para fin de año, y luego a 45 si la OPEP no interviene.
"Todo ocurre al mismo tiempo y el mercado está muy nervioso por la dirección que toma la economía, y eso provoca mucha volatilidad", añadió Phil Flynn, luego de conocerse indicadores de actividad decepcionantes en Europa.
Por otro lado, en Estados Unidos, "algunos observan que la demanda de gasolina no fue tan importante como se anticipaba durante el fin de semana del 4 de julio", día de la fiesta de la Independencia, añadió.
Cambio de foco
El mercado petrolero "se desvía de la inflación" y se dirige hacia la "desesperanza económica", afirmó Stephen Innes, analista de Spi Asset Management.
Algunos índices de actividad pusieron de manifiesto "el riesgo de recesión en la zona euro", sostuvo Neil Wilson, analista de Markets.com, para quien "la recesión parece inevitable".
El crecimiento de la actividad económica en la zona euro se frenó en junio en el sector privado, según el índice PMI publicado el martes por S&P Global.
Los temores de recesión mundial se volvieron entonces más importantes que "los problemas de abastecimiento más evidentes", que quedaron "relegados a un segundo plano", afirmó Innes.
En este contexto "es imposible prever cuándo la atención se desplazará irremediablemente de la oferta hacia la demanda", explicó Tamas Varga, analista de PVM Energy.
Los temores de recesión también continuaron prevaleciendo en los mercados de metales industriales, en particular para el cobre, conocido por reflejar la salud de la economía mundial al punto de que se le conoce como "Dr Copper" (doctor cobre).
El metal rojo es muy sensible a una potencial desaceleración económica mundial.
Por primera vez en 17 meses el cobre se intercambió por debajo de los 8,000 dólares la tonelada, una caída de 21% desde inicios de año. El martes llegó a tocar los 7.627,00 dólares por tonelada.