Nicaragua declaró el viernes alerta máxima en Managua por las fuertes lluvias que cayeron jueves y que afectaron a 13 mil 865 personas, más de 3 mil viviendas y 90 barrios de la capital, informaron las autoridades.
El presidente Daniel Ortega orientó al coordinador del Sistema Nacional para la Prevención, Mitigación y Atención de Desastres, Guillermo González, a preparar un decreto para declarar alerta máxima en el departamento de Managua.
"La situación de Managua en particular en este momento es motivo de preocupación de todos", expresó la coordinadora del Consejo de Comunicación y Ciudadanía, Rosario Murillo.
La portavoz del Gobierno reportó en la capital 2 mil 487 viviendas anegadas, 7 semidestruidas, 4 destruidas y 23 en riesgo de derrumbe, donde se está procediendo a evacuaciones.
Murillo dijo que hay 10 familias albergadas y 82 en proceso de evacuación hacia albergues mientras se busca una solución permanente.
Según los reportes oficiales, son 4 las víctimas mortales de la temporada lluviosa, que inició con fuerza el pasado 2 de junio, entre las que se encuentra un niño de 11 años de edad.
El niño falleció ayer al ser arrastrado por una corriente pluvial en Managua, cuando regresaba a su vivienda después de trabajar trasladando chatarras y basura en un carretón de carga halado por un caballo.
Murillo apuntó que el departamento de Managua es de alta vulnerabilidad, sobre todo en este momento del año frente a las lluvias, pero también frente a sismos y a sequía.
"Estamos enfrentado una situación crítica frente a las lluvias", dijo la portavoz del Gobierno.
En este sentido, explicó que un simulacro nacional de desastres, previsto para el próximo 17 de junio, podría postergarse.
"Estamos viviendo una realidad dramática que podemos esperar unos días para realizar el simulacro", sostuvo.