Una mujer fue víctima de trata de personas en un negocio ubicado en la zona 10. Los tratantes fueron condenados.
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El 17 de junio de 2014, una mujer de 19 años caminaba por las calles de la zona 10, estaba en busca de un trabajo. Coincidentemente recibió un volante en el cual indicaban que estaban contratando personal para trabajar en un "call center".
La mujer ilusionada por poder optar a una plaza laboral, se comunicó al número que indicaba el volante. De inmediato le atendieron y le programaron una entrevista de trabajo. Ella acudió a esa cita, en la cual hasta le hicieron supuestas pruebas psicométricas, todo aparentaba que estaba bien.
Ese mismo día por la tarde, la mujer recibió una llamada, le estaban confirmando la plaza laboral. Ella estaba feliz pues había conseguido un trabajo y por lo tanto iba a percibir ingresos económicos.
Confiada en que el trabajo era formal, acudió a su nueva ocupación, pero al llegar la trasladaron hacia otro inmueble, siempre en la zona 10.
Al llegar al lugar, la mujer se percató que se trataba de un "spa", estaba confundida porque su contratación era para estar en un "call center". Una vez ingresó a ese lugar, ya no pudo salir.
En "International Spa Ligth", la mujer fue obligada a prestar servicios sexuales, además estuvo retenida contra su voluntad. Cuando logró escapar, denunció a sus captores.
Condenados
La Fiscalía contra la Trata de Personas investigó el caso de la víctima. Con las pruebas que presentó logró sentencia condenatoria contra tres involucrados.
Mayra Fabiola Barrera Reyes y Marco Antonio Flores Arrazola por el delito de trata de personas en la modalidad de explotación sexual con circunstancias especiales de agravación, condenados a 10 años y seis meses de prisión y la multa de Q300 mil.
Mientras Cinthia Vanessa Barrera Álvarez a cinco años de cárcel y multa de Q50 mil por promoción, facilitación y favorecimiento de la prostitución.
Además, el Tribunal ordenó la cancelación de la patente Spa Light, negocio propiedad de Barrera Reyes.
