El Ministerio Público (MP), las autoridades locales y de salud del municipio del Puerto San José, Escuintla, investigan a una funeraria por el velatorio de una persona que falleció por Covid-19.
El alcalde Vinicio Najarro, confirmó que el hombre fue velado la noche del martes 16 de junio y se violentaron, por parte de la funeraria y los familiares, los protocolos de seguridad para realizar la exhumación de una persona contagiada de coronavirus.
"Tenemos el documento donde dio positivo, el informe de la defunción y el acta del Centro de Salud donde la familia firmó sabiendo que murió de coronavirus. Entonces estaban informados", declaró Najarro en una conferencia de prensa.
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El velatorio se realizó el martes por la noche en el Barrio Miramar. El jefe de la estación de Policía Nacional Civil (PNC) a cargo declaró: "Cuando llegamos no había ninguna persona, pero sí vimos el ataúd en el corredor".
Se informó al MP y se ordenó la cuarentena de la familia y de tres trabajadores de la funeraria que asistió en el velatorio a la deudos.
La directora del Centro de Salud local le pide a las personas que asistieron al funeral que se presenten a dicho centro para poder realizarles el hisopado.
El alcalde reiteró a los pobladores: "Les pedimos a los vecinos que sean responsables y que vayan al centro de salud para realizarse la prueba".
Hasta ahora se han reportado 11 casos de Covid-19 en el Puerto San José, dos han fallecido y desde que comenzaron los casos en el país han estado en cuarentena 215 personas informó la encargada del Centro de Salud.
Manejo de cadáveres
El Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social creó un protocolo de manejo de cadáveres con Covid 19, en el que advierte del “elevado riesgo” de contagio al manipular el cuerpo.
“El manejo de los cadáveres es uno de los aspectos más complejos en la respuesta a una epidemia o pandemia” se lee en el Plan para la prevención, contención y respuestas a casos de coronavirus Covid-19
El protocolo prohíbe la velación del cuerpo y los servicios religiosos. La cremación o entierro será inmediata y el costo lo asumirá la familia.
Los familiares no podrán apoyar en el embalaje del cadáver “únicamente el personal de salud y de la funeraria” contratada por la familia.
El personal que manipule el cadáver debe contar con equipo de protección personal completo que incluye: mascarilla N95, guantes de látex desechables, gafas protectoras y traje quirúrgico de manga larga con puños.
El cuerpo será desinfectado con alcohol al 0.5%.
El cuerpo será colocado en una bolsa especial y por la seguridad de los familiares, no debe abrirse. Luego se colocará en el atúd.
El protocolo también contempla que, en el momento del entierro se permite únicamente hasta 10 personas como máximo. No podrán acudir niños y adultos mayores.
El funeral no debe durar más de 15 minutos.
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