Richard Piquard, un hombre de 24 años que reside en Uxbridge, Massachusetts, Estados Unidos, podría enfrentar una pena de hasta siete años de prisión por crueldad animal.
Según se dio a conocer, el sindicado enterró vivo a su perro Chico, debido a que este no se llevaba bien con su gato y no pudo encontrarle un nuevo hogar.
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El shih tzu fue hallado aún con vida el domingo 9 de septiembre en una tumba poco profunda, pero tuvo que ser sacrificado por las lesiones que sufrió. Las autoridades indicaron que "Richard colocó una enorme piedra sobre el animal y luego le echó tierra".
El can fue encontrado por Kaylee Belanger, quien junto a su pareja caminaba por el lugar. "Al ver tierra suelta empezamos a escarbar y encontramos una enorme piedra sobre el perro, que gritó como nunca antes había escuchado gritar a un animal".
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En su defensa, Piquard dijo que Chico ya estaba muerto cuando fue sepultado, pero las pruebas entregadas a los fiscales revelaron lo contrario, por lo que fue acusado, aunque salió en libertad tras pagar una fianza de mil dólares.
*Con información de Metro West Daily y SDP Noticias