"El mismo 14 de enero se iniciará el proceso para eliminar la SAAS", así lo prometió el presidente electo Alejandro Giammattei. Más tarde dijo que también se desharía de la Secretaría de Seguridad Alimentaria (Sesan).
Sin embargo, ello no significa su desapareción inmediata. Para el politólogo Renzo Rosal, el "planteamiento es precipitado", porque cerrar una institución lleva tiempo, es un proceso que no es tan fácil ni rápido, por lo que considera que el Presidente Electo debe de analizar muy bien su propuesta.
Giammattei aseguró que iniciará con la presentación de la iniciativa para reformar la Ley Orgánica del Organismo Ejecutivo.
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La Secretaría de Asuntos Administrativos y de Seguridad de la Presidencia (SAAS) es la encargada de garantizar "permanentemente la seguridad, integridad física y la vida del Presidente y Vicepresidente", así como a sus familias. Además, brinda apoyo administrativo y logístico en las actividades oficiales y personales del mandatario.
Fue creada en 2003 con la aprobación del Decreto 50-2003 de Congreso, como uno de los objetivos planteados en los Acuerdos de Paz para quitarle la responsabilidad de la seguridad del Presidente al Ejército, quienes eran los encargados a través del Estado Mayor Presidencial, pero se le acusaba de haber participado en hechos delictivos contra la población durante el conflicto armado interno.
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La lucha por deshacerse del Estado Mayor Presidencial no fue fácil. La idea era que civiles fueran capacitados para defender la integridad física del binomio presidencial y sus familias, sin embargo, con el transcurso de los años ha sido la institución ha sido señalada de abusos y corrupción, incluso en enero de 2018 se develó que la SAAS gastó 307 mil quetzales en lujos, chocolates, licores y flores, al extremo que gastó 21 mil 900 quetzales en la adquisición de un par de lentes marca Carolina Herrera para el presidente Jimmy Morales.
Los abusos develados por la SAAS han generado críticas y desgaste entra la población. Y Giammattei no es ajeno. El presidente electo prometió que una de sus primeras acciones será desaparecer esa Secretaría, por lo que aseguró que su bancada, con 17 diputados electos de 160, presentarán una iniciativa de ley para que, de urgencia nacional, desaparezca la SAAS".
Si lograra pasar por el Congreso, empieza un proceso administrativo, que según Rosal podría llevar hasta dos años. Mientras que, el expresidente del Congreso, Roberto Alejos, recordó que el Banco Nacional de la Vivienda (Banvi), intervenido en 1992, aún no ha logrado desaparecer en su totalidad.
Uno de los ejemplos más recientes es el Fondo Nacional para la Paz (Fonapaz), la cual empezó su proceso de liquidación en 2013 y aún no se ha terminado de liquidar en su totalidad.
Rosal recordó que no se trata únicamente de cerrar la institución, ya que esta tiene recurso humano, que podría estar sindicalizado, lo que provoca un proceso más largo y con mucha negociación, pues hay que buscar un espacio para ubicar a todas las personas.
"Hay que cerrar proyectos abiertos, pensar en el recurso humano, si hay o no sindicatos, pactos colectivos... es un gran desgaste, que podría generarle aplausos, pero no tantos, principalmente por lo relacionado con seguridad alimentaria, en el caso de la Sesan, que también anunció cerrar", dijo el politólogo.
No sean ridículos
Mientras que el actual presidente Jimmy Morales calificó de "ridículos" a los periodistas que preguntaron sobre la propuesta de Giammattei sobre desaparecer la SAAS.
"La SAAS tiene cerca de 1,300 personas contratadas... la SAAS tienen una función... en todos los países del mundo, si no es un servicio secreto, es una guardia presidencial y en el caso de Guatemala es una Secretaría...", manifestó.
Morales recordó que la SAAS cuida las cinco residencias presidenciales, en una de ellas vive él junto a su familia y en otra el Vicepresidente, también acompañado de su familia. Además, hay aspectos protocolarios y de seguridad que no pueden quedar sin ningún encargado.
El Presidente recordó que existe el delito de "magnicidio", el cual puede utilizarse hasta para desestabilizar un país, por lo que consideró que la propuesta no es muy correcta.
También la Sesan
Lo mismo ocurriría con la Sesan, otra de las promesas que Giammattei hizo. Según el mandatario electo, la Secretaría no ha cumplido con su obligación de mejorar las condiciones nutricionales ni detener la desnutrición, por lo que propuso cerrarla y que sus funciones las asuma el Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social (MSAPAS).
Sin embargo, la Sesan también fue creada a través de un Decreto en el Congreso, por lo que debe pasar por el Organismo Legislativo para iniciar su disolución.
Al parecer, el vicepresidente electo Guillermo Castillo lo tiene claro, y reconoció que a pesar de ser una propuesta de Giammattei, "desaparecer una institución no es un proceso fácil... es un planteamiento que hizo el Doctor, pero obviamente se tendrá que tomar bien la decisión", dijo el 1 de octubre durante una conferencia de prensa en la que lo acompañó el actual vicepresidente Jafeth Cabrera.
Reforma integral
Para Alejos la solución no es "chapusear el Estado", por el contrario, se requiere de una reforma integral que debe de empezar con la aprobación de la Ley de Servicio Civil, para que los puestos de trabajo en el Gobierno no se otorguen por compadrazgos, amiguismos o pago de favores políticos, sino por meritocracia.
"No sólo se trata de la SAAS o la Sesan, por ejemplo, el Ministerio de Gobernación aún es el encargado de ver todo lo relacionado con la aprobación de bares y discotecas, de permitir la instalación de las ferias, incluso, cada año los Gobernadores deben de recibir el acta de sobrevivencia de los jubilados del Estado, en diciembre es una gran cola de todos los jubilados presentándole su hoja de que aún están vivos al Gobernador para que les paguen en enero, eso no puede seguir así", manifestó Alejos.
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