Jaines Andrades empezó a trabajar como conserje en el Baystate Medical, un hospital en Springfield, Massachusetts. Sin embargo, la joven decidió crecer y se inscribió en una escuela de enfermería. Diez años después, regresó al hospital, convertida en una profesional.
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La vida de Jaines Andrades ha sido difícil, como la de muchos jóvenes que deben emplearse en trabajos que no reflejan su capacidad. Antes de trabajar como conserje en el hospital, trabajaba en un restaurante de comida rápida.
"Es difícil ser la persona que limpia. Si tuviera que regresar y hacerlo de nuevo, lo haría. Vale la pena", dijo Andrades a WBZ-TV, una cadena de radio afiliada de CNN.
Su historia se conoció luego de escribir un post en Facebook, en el que narró su trayectoria de conserje del hospital a enfermera practicante, y publicó una foto de sus tres gafetes.
Andrades relató que fue a una entrevista para ser conserje en el hospital. Sin dudarlo, tomó el puesto. Explicó que siempre quiso ayudar a la gente y le pareció que limpiando ese centro asistencial era una buena forma de empezar.
Luego, tomó clases de enfermería y logró convertir su sueño en realidad: se convirtió en enfermera de Baystate, y luego en enfermera practicante en el mismo lugar donde solía limpiar.
Su parte favorita de la enfermería es brindar alivio y consuelo a sus pacientes. "Me encanta la intimidad con la gente", le dijo Andrades a la radio afiliada de CNN.
"Las enfermeras obtenemos el crédito con más frecuencia, pero todos tienen un papel muy importante. No podría hacer mi trabajo sin ellos", comentó.
La joven dijo sentirse feliz de que su historia inspire a otros a no dejarse vencer y a luchar por cumplir con sus sueños.
"Estoy muy contenta. Si puedo inspirar a alguien, eso en sí mismo hizo que el viaje valiera la pena", expresó a la WBZ-TV.
*Lee la nota completa en inglés, en CNN
