La estadounidense Aimee Copeland es una chica como todas. Activa, llena de vida, amante de las aventuras extremas, la naturaleza y las actividades al aire libre.
Además: Uno de los intérpretes de "El Taxi" entre la vida y la muerte.
Pero pronto su vida dio un dramático giro. A los 24 años, en un paseo con sus amigos decidió aventarse de una "tirolesa casera" pero esta se rompió.
La pierna de Copeland fue seriamente herida. Sus acompañantes la llevaron al hospital donde trataron su herida pero, días después, comenzó a debilitarse y lucir muy mal.
Inmediatemante fue llevada de emergencia, cuando descubrieron lo peor: Aimee tenía Fascitis Necrotizante, una bacteria que destruye los tejidos de la piel.
Los doctores tuvieron que amputarle las manos, su pierna y el pie de la otra pierna para salvarle la vida.
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Su vida cambió por completo, pero, en lugar de encerrarse lamentándose por este suceso, aprendió a vivir con su "nuevo yo", como explica en una entrevista que la revista People le hizo y que fue publicada este fin de semana.
Sus mensajes positivos y fotografías relatan cómo, poco a poco, va recuperando su vida; sus letras son tan inspiradoras que oficialmente se ha convertido en la voz de la comunidad de personas con discapacidad.
Definitivamente Aimee es un gran ejemplo a seguir.
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Con información de People Magazine.
