De un día para otro, los precios en las diferentes gasolineras del país incrementaron aproximadamente un quetzal. Esto impactará directamente en el bolsillo de los guatemaltecos que vieron con sorpresa el aumento.
En este sentido, los precios por galón quedan de esta forma: superior, 23.49 quetzales; regular, 22.19; y diésel, 17.79.
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Luis Velásquez, director de Comercialización de la Dirección General de Hidrocarburos (DGH) del Ministerio de Energía y Minas, explicó que durante el monitoreo semanal la entidad notó un incremento "brusco" en los precios.
"Esto es consecuencia directa de los precios en el mercado internacional, los cuales se han visto afectados por el huracán Harvey que golpeó el estado de Texas, Estados Unidos", señaló Velásquez.
El funcionario de la DGH detalló que el huracán afectó cuatro de los principales puertos de Texas y es este lugar de donde transitan los buques que abastecen a los países latinoamericanos.
Asimismo, señaló que los precios se justifican con la coyuntura internacional y que van a aumentar los monitoreos para evitar la especulación y los rumores.
¿Desabastecimiento?
Por su parte, Claudia García, analista de la Asociación de Investigación y Estudios Sociales, señaló que este aumento puede estar contrarrestado con la situación del tipo de cambio con el dólar.
"Se prevé un desabastecimiento porque en Texas están los mayores oferentes de crudo refinado", comentó García.
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No obstante, los inversores internacionales aseguran que cuentan con reservas de crudo suficientes dado que el mercado que está saturado.
Por su parte, la DGH señala que Guatemala cuenta con abastecimiento de combustible para mantener un consumo normal en los próximos 15 o 20 días. "Esperamos que Estados Unidos resuelva pronto la situación en sus puertos para evitar que el precio siga subiendo", añadió la analista.
Los pronósticos
Mario Pérez, director de la DGH, pronostica que los próximos meses, a pesar de la catástrofe provocada por el huracán Harvey, será de estabilidad en los precios.
“Consideramos que los precios se mantendrán estables hasta finales de año, lo que no quiere decir que no haya modificaciones a futuro”, predijo.
Pérez apuntó que, históricamente, en marzo y abril se da un incremento en los precios porque se cierran las refinerías del Golfo. Para junio los valores se normalizan y en la época del verano en el hemisferio norte reportan un leve aumento porque sube la demanda.
Aumento de precio en 2018
El peor escenario para los bolsillos de los conductores se prevé a partir de 2018, cuando el precio del barril de crudo se estabilice después de una época de sobreproducción.
Según Pérez, la tendencia es que a partir de los primeros meses del próximo año se reduzca la producción diaria mundial hasta los 32 millones de barriles para que se vaya eliminando el exceso de oferta.
Esto provocaría que el precio por barril de crudo aumente de los 46.76 que registra actualmente hasta los 70 dólares.
No obstante, para encontrar ese punto de equilibrio, se debe dar una mejoría económica en las principales potencias consumidoras.
Además, serán importantes otros factores, como el juego geopolítico entre Rusia, Irán, China y Estados Unidos; el juego geoeconómico con las sanciones a Venezuela; o la reducción en inversión de las grandes petroleras.
