El FC Barcelona superó con algunos apuros al PSV que pecó a la hora de la definición y permitió que los azulgrana hicieran los goles para llevarse los tres punto de territorio holandés.
Cuando el partido estaba más cuesta arriba para los culés, apareció Lionel Messi para con regates y filigrana vulnerar a la zaga local y convertir el 1-0 a los 61 minutos.
El gol del Barça mermó la moral de los locales que resintieron el no haber concretado las acciones creadas.
Con el descontrol del PSV llegó el segundo tanto, con asistencia de Messi, tras el cobro de un tiro libre para que Gerard Piqué marcar el 2-0 a los 70 de juego.
El conjunto local tuvo dos opciones claras para descontar, sin embargo el gol de la honra llegó hasta el 82, por medio de Luuk de Jong.
Sobre la hora el PSV reclamaba un penalti dentro del área catalana, pero el árbitro no vio nada y el partido terminó 2-1 en favor del Barça que sigue con buen pie en Champions.