Quizá ya has probado el té chai, también llamado "masala chai", y lo has consumido con sus diferentes variantes.
Esta exótica bebida ancestral nació en India, es rica en antioxidantes y mejora la salud cardiovascular, pues las especias con las que está hecha tienen un efecto calmante y revitalizante.
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Esta aromática bebida se creó para aliviar dolores, mejorar la circulación y la digestión. El chai también previene resfriados, estimula el metabolismo, reduce la hinchazón abdominal y, además, es delicioso.
Se compone de canela, cardamomo, clavo de olor, jengibre, pimienta y té negro, este último se sumó con la colonización británica; también se le agrega vainilla y nuez moscada, que le dan ese toque dulzón.
Si se te antoja hacer tu propia versión, puedes interpretar tu receta en el hogar.
Necesitas:
1/2 litro de agua
1/2 litro de leche con sabor a vainilla
2 cucharadas de té negro
2 cucharadas de canela en polvo o dos rajitas
1 cucharada de cardamomo
2 cucharadas de clavo de olor
1 cucharadita de pimienta negra
1 cucharada de anís estrella
1 cucharadita de jengibre en polvo o rallado
Para preparar:
Mezcla el agua con la leche con sabor a vainilla en una olla. Mientras el líquido se calienta y comienza a hervir, agrega el clavo, la pimienta negra, el anís, el cardamomo, el té negro y el jengibre. Luego cuela la bebida, usa azúcar o miel para endulzar, si lo deseas. Puedes tomarlo caliente o dejarlo enfriar.
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