Luego de que un guardia de la Universidad de San Carlos de Guatemala (Usac) asesinara a un abogado dentro del campus central, las autoridades decidieron desarmarlos. Cuatro meses después del homicidio, tratan de mejorar la seguridad con el apoyo de "monitores", arreglaron las cámaras de vigilancia y colocaron botones de pánico.
Los guardias tenían armas de fuego, pero tras el asesinato se las quitaron. A finales de marzo, el rector Murphy Paíz dio la orden de destruir las 56 pistolas que usaban los vigilantes. La Usac está licitando la compra de armas no letales: gas pimienta, batones, paralizadores.
Cuando ocurrió el asesinato, Leonel Medrano era el jefe de seguridad. Él fue relevado de ese puesto y se le mandó a vigilar el Paraninfo Universitario. Medrano dice que no entiende porque se le quitó del cargo pues asegura que colaboró con los investigadores del caso. El exjefe de seguridad renunció a finales de junio.
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El protocolo
Alejandro Morfín y Ermitas Fernández son los nuevos encargados de la seguridad dentro del campus universitario. El primero empezó a laborar justo después del homicidio y Fernández asumió la jefatura hace un mes.
La nueva estrategia de seguridad se enfoca en implementar un plan de prevención de la violencia. La Usac activó el número de emergencia 1592 y un portal de reporte de incidentes.
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Se colocaron ocho botones de pánico que pueden presionar los estudiantes si se encuentran en peligro o han sufrido un robo para que los vigilantes acudan en su auxilio. Al momento del asesinato, solo el 25% de las cámaras de vigilancia funcionaban, por lo que dieron prioridad a repararlas.
Además, Murphy planea colocar un sistema de molinetes y talanquera electrónicas, un control de identificación por carné con control de ingreso a través de un ID único, bitácora de visitantes, software de reconocimiento de placas y rostros, vigilancia con drones y detectores de metal. Estos servicios todavía no funcionan. El rector cree que en los próximos cinco años se podrían implementar.
Monitores
Un total de treinta monitores internos de protección asumieron el pasado martes la tarea de evaluar los puntos vulnerables, la limpieza y funcionamiento de las instalaciones. Los monitores recorren el campus central para vigilar, prevenir y actuar cualquier hecho de violencia.
Otra de sus asignaciones es velar por el cumplimiento de la política de cero uso de productos de poliestireno y plástico no reciclable, debido a los comercios ubicados en el campus universitario tienen prohibido el uso de plástico y deben usar otros productos amigables con el medioambiente.
Desde el 1 de julio, la Usac también tiene seis paramédicos que integran el equipo de monitoreo de salud, capacitados para la prevención y atención de emergencias.
*Se solicitó una entrevista con Ermitas Fernández y Alejandro Morfín, pero no accedieron a dar declaraciones. Morfín indicó que Ingrid Cárdenas -del departamento de Publicidad- se comunicaría con Soy502, sin embargo no lo hizo.
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