Los perros tienen varias formas de comunicarse, las cuales les permiten transmitir sus emociones o recibir información de su entorno. Aquí conocerás qué significa cuando tu perro te lame.
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Además de los ladridos, aullidos o gemidos, hay otros sistemas de comunicación no verbales como movimientos de la cola y orejas, la disposición del cuerpo y el que más interesa en esta nota: el lamido.
A través de esta práctica el perro:
1. Te saluda:
Tanto a seres humanos como a otros perros, ellos manifiestan su alegría y saludan a sus dueños lamiéndolos, cuando lamen las manos es una señal de lealtad y afecto.
2. Explora:
Cuando los perros lamen también aprovechan el momento para recoger información de dónde ha estado su dueño. Suelen lamer el suelo, diferentes objetos o incluso la orina de otros perros y así descifrar información.
3. Pide comida:
Esta razón es la más importante. El lamido por alimentación es instintivo y lo utilizan cuando llega la hora de comer. Esto se debe a que cuando son muy cachorros lamen el hocico de su madre para que ella regurgite la comida que luego será para ellos.
4. Quiere atención:
Cuando un perro está aburrido o quiere algo, puede lamerte para llamar la atención. Asimismo, si surge el efecto deseado, aprenderá a utilizar esta técnica para lograr lo que quiere en ciertos momentos.
5. Primeros auxilios:
Cuando ven una herida la lamen, ya sea de una persona o una propia, de esta manera limpian la herida y retiran el tejido muerto, no lo hacen para curarse como algunos creen.
¿En qué momento esta acción puede ser una señal de alerta?
Todas estas razones por las cuales un perro suele utilizar su lamido, se podría decir que son agradables y no hay ningún problema con ellas.
En cambio, hay un razón que no se debe pasar por alto y es cuando el perro utiliza el lamido para canalizar su estrés o ansiedad.
Si se observas que tu perro lame constantemente sus patas, hay que ocuparse y consultar con un veterinario.
Esta obsesión por lamerse las patas deriva de un nivel de ansiedad que debe canalizarse haciendo actividad física. Por eso, cuando un perro no se ejercita, desarrolla estrés y para canalizarlo empezará a lamerse de manera obsesiva sus patas.
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