Una investigación resalta que el papa emérito tuvo conocimiento de un caso mientras era arzobispo.
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Un caso de abuso contra menores se ha destapado en la iglesia católica y que fue del conocimiento de Joseph Ratzinger cuando él era arzobispo en Alemania.
El incidente involucra al capellán Peter H. quien fue trasladado en 1980 del obispado de Essen al de Múnich-Freising después de haber abusado de varios menores.
Sus superiores, entre quienes se encontraba Joseph Ratzinger, no esclarecieron el señalamiento, sino que le pidieron acudir a una terapia psicológica.
Sin embargo, el sacerdote nuevamente fue acusado de abusos después de su traslado, siendo condenado a 18 meses de prisión. Tras cumplir su pena, la iglesia le otorgó un nuevo traslado.
La cadena pública ZDF y el portal de Die Zeit publicaron un documento en el que se afirma que Ratzinger “estuvo dispuesto a admitir al sacerdote H. teniendo conocimiento de la situación”.
Dicho documental acusa a Benedicto XVI y otros líderes eclesiásticos como responsables de haber incumplido su responsabilidad ante los niños y adolescentes “confiados a su cuidado pastoral”.
Por medio de secretario personal, el papa emérito negó haber conocido del historial del sacerdote H., "por lo que no contravino su obligación de informar a Roma," según declaraciones citadas por ZDF.
Peter H. no fue retirado del sacerdocio hasta 2010, un suceso por el que el documento también critica al actual arzobispo de Munich, el cardenal Reinhard Marx, que en 2008 encargó un informe psiquiátrico sobre H. y le trasladó de nuevo, renunciando a abrir una investigación interna.
