El francés Zinedine Zidane impuso su ley en el regreso al banquillo del Real Madrid y le devolvió la alegría a la afición blanca con el triunfo 1-0 sobre el Celta de Vigo, en el estadio Santiago Bernabéu.
El técnico puso en la alineación titular al portero Keylor Navas, al defensor Marcelo y al centrocampista Isco, la "vieja guardia" con la que consiguió el éxito en su primera época y que había sido relegada por sus antecesores.
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Y no lo defraudaron. Keylor se mandó con un par de atajadas, Marcelo se adueñó de su banda e Isco marcó el gol que abrió el camino el triunfo. Bale sentenció la victoria.
El Madrid no la tuvo fácil ante un rival que vendió cara la derrota con orden y teniendo el contragolpe como su principal arma de cara a la portería contraria.
Maxi tuvo la más clara de los visitantes al minuto 16, pero Navas reaccionó con grandes reflejos para desviar el balón.
Al 31, Gareth Bale estrelló la pelota en el travesaño y al 36 Marcelo sacó un zurdazo que el portero mandó al tiro de esquina.
Ya en la segunda parte, al minuto 56, Luka Modric disparó desde fuera del área para marcar, pero su tanto fue anulado por fuera de lugar. El VAR intervino.
Pero, al 62, Isco concretó una gran jugada colectiva en la que Asensio y Benzema fueron protagonistas. La acción también fue revisada por el VAR.
Y al minuto 77 Marcelo asistió a Gareth Bale para el segundo del Madrid.
Zidane dirigió su partido 150 con el Real Madrid y tuvo un arranque de segunda etapa prometedor.
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