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Entre bailes, música y alegría, se llevó a cabo la procesión para celebrar la resurrección de Jesucristo este domingo en Lívingston, Izabal.
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Atrás quedó la solemnidad y la tristeza de la pasión y muerte de Jesucristo que se conmemora durante la Semana Santa, pues con música y bailes se festejó su resurrección.
"¡Gloria, gloria, aleluya! ¡Jesús resucitó!", se escuchaba entonar a músicos con redoblantes, trompetas y clarinetes, mientras que los cargadores y asistentes bailaban alrededor del anda que se movía de un lado a otro en muestra de alegría.
La procesión forma parte de las actividades que se llevan a cabo en la Parroquia Nuestra Señora del Rosario del Labug Livingston, Izabal.
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La actividad es promovida por la Hermandad de Jesús de Nazareno, quienes con alegría y devoción festejan la resurrección de Cristo.
Esta actividad religiosa combina la doctrina de la Iglesia Católica, con las costumbres de la comunidad Garífuna y Xinca. Los fieles, al ritmo de los tambores, caminan por las calles más recónditas y olvidadas de Lívingston.
