Usaban flotadores y pelotas de playa, pero esta escena ocurrida este domingo, no fue un momento de diversión en una playa o balneario, sino una protesta en el Libramiento de Chimaltenango.
El Libramiento es una obra por cuya construcción el Gobierno de Jimmy Morales pagó más de 500 millones de quetzales, pero desde que fue inaugurada ha presentado anomalías y los derrumbes e inundaciones en la ruta han sido constantes.
Por eso, los manifestantes aprovecharon que durante la noche del sábado llovió y que parte de esta ruta continuaba inundada, por lo que tomaron los flotadores y algunos carteles para mostrar su inconformidad.
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"Esta megaobra ha sido un fraude, ya que está en pésimas condiciones y no compensa los millones que fueron destinados para su construcción", aseguró Evelyn Cabrera, una de las voceras de los manifestantes.
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Cabrera señaló que la protesta busca que la población se involucre más en la lucha contra la corrupción y que apoye para que se destinen más fondos para proyectos en favor de los niños, y menos a obras señaladas de corrupción.
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Soy502 intentó contactar a Myriam Portillo, vocera de la Constructora Nacional, S.A. (Conasa), empresa encargada de la construcción del Libramiento de Chimaltenango, pero no atendió las llamadas.
Sin embargo, en una anterior oportunidad, Conasa explicó que la inundación en la obra se debe a un “sabotaje”: acusan a pobladores del lugar de colocar un "tapón" en el sistema de drenajes, con el propósito de obstaculizar el desfogue de las aguas pluviales.
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