Luz Raquel Padilla fue quemada viva tras denuncia por amenazas de muerte

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La indignante historia de Luz Raquel Padilla, una mujer que murió el 19 de julio tras ser quemada en Guadalajara, ha evidenciado la falta de atención en los casos de femicidio, a pesar de las denuncias.

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El caso se volvió símbolo de lucha para las organizaciones que piden justicia al considerar que no se reaccionó a tiempo para evitar la tragedia.

"¿Hasta cuándo voy a tener que vivir con miedo?", escribió Luz el 17 de mayo en Twitter junto a fotografías de grafitis que habían hecho en la escalera que la conducía a su apartamento ubicado en Zapopan, estado de Jalisco. "Te voy a quemar viva" y "Te vas a morir, machorra", fueron los mensajes que pintaron en el área de su vivienda.

Padilla era intimidada constantemente por sus vecinos debido a que su hijo de 11 años padece autismo y hacía ruidos cuando atravesaba sus crisis. El hombre que vivía frente a ella, en una ocasión, la roció con cloro industrial. Su denuncia fue desestimada.

Dos meses después, cuatro hombres y una mujer le rociaron alcohol y luego le prendieron fuego en un parque cerca de su domicilio en la colonia Arcos de Zapopan. La víctima sufrió quemaduras en más del 80% del cuerpo, que causaron su muerte, según informó el hospital que la atendió. 

Su vecino Sergio Ismael "N", fue llamado a testificar y fue detenido como sospechoso por causar "lesiones, amenazas y delitos cometidos en contra de la dignidad de las personas".

Según la organización "Yo Cuido México" la razón de los ataques se debió a la intolerancia por los ruidos que su hijo hacía cuando atravesaba los momentos propios a su condición. El menor quedó bajo el cuidado de su abuela y su tía.

El fiscal de Jalisco, Luis Joaquín Méndez Ruiz dijo que el vecino denunciado por Padilla se presentó voluntariamente a testificar el pasado miércoles y se llevó a cabo "diversas acciones tanto de campo y gabinete con la finalidad de obtener información sobre la identidad de los agresores".

"De acuerdo a los primeros datos obtenidos dentro de la carpeta de investigación, no hay información que posicione a esa persona en el lugar que ocurrieron los hechos (el asesinato de Padilla), sin embargo, se sigue investigando como una de las posibles líneas", dijo la Fiscalía.

Padilla publicaba frecuentemente en Twitter sus encuentros con los habitantes del edificio, también se quejaba del ruido, de que le bloqueaban el acceso a la azotea, de las fiestas que celebraban constantemente y de mantener a un perro en las zonas comunes. 

Un día antes de su ataque, una de sus vecinas le mandó a agentes de la policía tras una de las crisis de su hijo. "Cómo es posible que a un menor con autismo y epilepsia, por tener una o varias crisis y pegar en las paredes, mi vecina le mande una patrulla".

Las organizaciones afirman que la mujer no recibió la "debida atención o seguimiento" tras denunciar ante la comisaría de Zapopan, además le fue negado el acceso al procedimiento 'Pulso de Vida', una señal de ayuda por medio de un botón de pánico, para que, en caso de emergencia, acuda la patrulla más cercana a quien solicita asistencia.

"Yo cuido México!" contó que se consideró que "las amenazas que recibía por parte de 'terceros' no eran causa suficiente para ser beneficiaria".

La Comisión Estatal de Derechos Humanos en Jalisco inició una queja de oficio por la "presunta falta de debida diligencia reforzada en la atención y seguimiento en contra de Fiscalía Estatal y la Comisaría de Policía en Zapopan".