Un hombre, hasta ese momento desconocido, irrumpió en una mezquita de Nueva Zelanda y disparó contra quienes aparecían en su camino, mientras transmitía todo por Facebook Live.
Del ataque se reportan 49 personas fallecidas y 20 heridas. Las imágenes estaban siendo observadas por miles de personas, incluida la familia de Brenton Harrison Tarrant, el hombre que ejecutó el horrible crimen, quien se paseaba por la mezquita Al Noor en el centro de la ciudad y la mezquita Masjid en el suburbio de Linwood.
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Medios locales afirman que la familia del terrorista llamó horrorizada a las autoridades y ofrecieron colaborar con cualquier información. Más tarde, un oficial del lugar indicó que Tarrant no había pasado mucho tiempo en Australia en los último cuatro años.
Además de transmitir en vivo su crimen, el joven de 28 años publicó en Facebook un manifiesto de 73 páginas en donde se describió a sí mismo como un "solo hombre blanco normal".
El crimen ya está siendo investigado. Sin embargo, Tarrant aseguró que llevó a cabo el ataque para "reducir directamente las tasas de inmigración a las tierras europeas".
Mientras Australia se encuentra aún en estado de shock, se ha revelado que el terrorista es un joven educado que estudió en una secundaria local. Trabajaba en un gimnasio, en donde su exjefe los describió como un "hombre colaborador que regularmente se ofrecía para entrenar a los niños de manera gratuita".
Un gran impacto
Sin embargo, la familia de Tarrant reveló que en abril de 2010 falleció de manera repentina por un cáncer el papá del atacante a sus 49 años, por lo que el, ahora terrorista, emprendió un viaje de siete años alrededor del mundo, donde temen que haya sido el momento para que se "radicalizara".
Los miembros de la familia que permanecen en el área de Grafton están en shock y tratando de llegar a un acuerdo con sus actos, y están ayudando a la policía con sus investigaciones, aseguró uno de los investigadores.
En el manifiesto que publicó, el joven reveló que había estado planeando el ataque por más de dos años, pero que se decidió por Christchurch hace tan solo tres meses. E indicó que Nueva Zelanda no era la "opción original para el ataque", pero lo describió como "un objetivo rico en un entorno como en cualquier otro lugar en el Oeste".
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