Una alimentación incorrecta puede ocasionarle a los perros serios problemas de salud, que van desde la obesidad a trastornos cardiacos o renales.
Entre los alimentos prohibidos por los veterinarios destaca el chocolate. Éste contiene una sustancia llamada "teobromina", un compuesto químico estimulante que los canes no pueden metabolizar tan rápidamente como los humanos. Mientras que a nosotros nos toma entre 20 y 40 minutos este proceso, gracias a una enzima que tenemos en el hígado llamada "citocromo P450", a ellos les puede costar hasta un día entero.
En altas dosis, esto puede aumentar la contractilidad del corazón del animal y afectar a su sistema gastrointestinal, causándole vómitos, diarrea y deshidratación. Curiosamente ésta es una de las causas de intoxicación más comunes entre estas mascotas, a las que les encanta el sabor dulce del chocolate, a diferencia de los felinos.
Los más dañinos son los chocolates sin azúcar para uso industrial, el chocolate con leche y el blanco, pues son los que contienen mayor cantidad de teobromina, la cual puede ser letal si sobrepasa los 300 miligramos por kilo en el can.
Si su mascota presenta síntomas de envenamiento entre las 4 y las 24 horas después de haber ingerido chocolate y no está eliminando los desechos, es conveniente buscar ayuda veterinaria cuanto antes para que le induzca el vómito.