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La selección de Corea del Sur no fue un protagonista en el Mundial de Rusia y el sábado tuvieron que despedirse de la posibilidad de clasificar a la siguiente ronda tras perder contra México. Sin embargo, el drama que vive Son Heung-Min era mayor que el resto de sus compañeros.
El atacante que está a punto de cumplir los 26 años sabe que su exitosa carrera futbolística corre riesgo de terminarse abruptamente. Es una de las estrellas del Tottenham de Inglaterra y luce saludable, pero un motivo extra deportivo lo podría quitar de los campos.
Las leyes de Corea del Sur imponen que los hombres deben realizar dos años de servicio militar obligatorio antes de los 28 años sin excepciones.
Pero en 2002 sí existió una excepción cuando Corea llegó hasta la semifinal del Mundial de aquella vez y las autoridades calificaron de héroes a los jugadores y ellos no cumplieron con esta disposición. Son tenía en su mente realizar una hazaña similar en Rusia 2018 que abra la puerta rumbo al perdón.
Todavía tiene una chance: las reglas de su nación indican que los deportistas que ganen medallas en los Juegos Olímpicos o preseas de oro en los Juegos Asiáticos recibirán de manera inmediata la excepción del servicio militar, aunque deberán afrontar cuatro semanas de entrenamiento básico.
Según informaron en el medio catalán Mundo Deportivo, si Son debe acudir a su formación militar de manera completa pasará entre 21 y 36 meses cumpliendo con su deber como ciudadano coreano dependiendo la fuerza que elija.
En el Ejército debe cumplir 21 meses; la Marina, 23 meses; Fuerza Aérea, 24 meses; y Fuerza Marina, entre 24 y 36 meses.
Sus lágrimas pusieron sobre la mesa el tema y los medios ingleses aseguran que el Tottenham evalúa renovar su contrato, aunque esta obligación en su futuro podría complicar la negociación ya que deberían incluir una cláusula con algún tipo de interrupción.
*Con información de Infobae
