Este martes 19 de diciembre tuvo lugar el juego por los cuartos de final de la Copa de la Liga de Inglaterra entre el Leicester y Manchester City, en un emocionante juego que terminó en una tanda de penales tras el empate 1-1 en el tiempo reglamentario.
A pesar de haber pisado el césped durante pocos minutos, el gran protagonista del encuentro fue el arquero chileno Claudio Bravo que se las arregló para ser la figura del encuentro en los tiros a 11 metros.
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En el partido que finalmente terminó 3-4 en favor de los "Citizens", Bravo logró detener un balonazo enviado por Karim Mahrez, logrando así la clasificación de su equipo a la semifinal del torneo.
Como era de esperarse, el arquero salió de inmediato a festejar el triunfo. Sus compañeros corriendo a felicitarlo y también el técnico Pep Guardiola.
Fue en ese momento que ocurrió una particular situación. Al ver Bravo que Pep se dirigía hacia él, se voltea y le resta importancia, por lo que el director técnico lo abraza por la espalda cambiando su cara de felicidad a una más seria.
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El hecho llenó las redes sociales de especulaciones sobre la relación entre el chileno y el español en las filas del club inglés.
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*Con información de La Tercera