El pasado 10 de enero, la familia de Aurelino Vieira, quien se encontraba internado en un Hospital de Oliveira de Azeméis, en Portugal, fue notificada de su muerte por Covid-19 , por lo que dos días después le hicieron un funeral y lo enterraron.
Según reporta el Jornal de Notícias de Portugal, Aurelino Vieira ingresó al hospital hace dos meses por problemas respiratorios, y fue durante su estancia en esa institución de salud donde se infectó de coronavirus SARS-CoV-2.
Debido a los protocolos sanitarios para evitar la propagación del virus los familiares nunca pudieron ver el cuerpo.
Sin embargo, 20 días después (el 30 de enero) recibieron una llamada del hospital donde les informaron que se había producido un error y que su pariente en realidad seguía vivo.
¿Qué ocurrió?
El cuerpo de la persona que había sido enterrado pertenecía a otra familia, quienes al detectar el error notificaron al hospital.
“Sé que en estos momentos los médicos tienen mucho trabajo, pero espero que este acontecimiento sirva para que haya más cuidado en el futuro”, dijo a Jornal de Notícias el hijo de Aurelino Vieira.
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