De acuerdo con los expertos, el número de personas que recibe atención psicológica desde que inició la pandemia se ha duplicado en comparación con años anteriores.
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El Covid-19 es una enfermedad que ha causado estragos en la salud de las personas, tanto a nivel mundial como en Guatemala.
Las afecciones no solo han sido físicas, sino también mentales. Esto como consecuencia de padecer dicha enfermedad, perder a un ser querido o permanecer confinado.
A pesar que los guatemaltecos no están tan familiarizados con la atención psicológica o psiquiátrica, el número de pacientes que buscan ayuda de este tipo se ha duplicado en comparación con los años en los que no había Covid-19.
Pacientes nuevos cada semana
"Para este año hemos tenido un crecimiento en la población que atendemos. Todas las semanas tenemos pacientes nuevos", asegura Angela Reyes, psicóloga de la Liga de la Higiene Mental.
De acuerdo con Reyes, desde los primeros casos y muertos por coronavirus en el país, se generó un estado de "histeria colectiva" o "estrés", que llevó a las personas a abarrotar los supermercados, para abastecerse de cosas que en algunos casos no necesitaban.
Sin embargo, los sentimientos se acentuaron cuando llegó el confinamiento, relata Reyes, quien explica que para algunos el trabajar en casa se volvió más estresante que asistir a los diferentes lugares de labores.
Atención por estrés y ansiedad
Según la experta, previo a la pandemia, muchas personas ya sufrían ansiedad, pero la incertidumbre la incrementó e hizo que los guatemaltecos tuvieran miedo de contagiarse, o enfermarse y contagiar a sus seres queridos.
"Nos daba miedo la enfermedad, nos daba miedo enfermarnos, o nos daba miedo adquirirla y poder contagiar a miembros de nuestra familia, porque lo que oíamos era que quien se enfermaba se moría", asegura Reyes.
Quien también relata que otras personas empezaron a experimentar el miedo a enfermarse no por enfermarse en sí, sino por terminar hospitalizado en los centros de atención habilitados para pacientes con Covid-19 y separarse de la familia, para nunca más volver a verlos.
Como dejar ir a un ser querido
Ante los miles de fallecimientos por Covid-19 en Guatemala, decenas de personas han buscado el acompañamiento de un tanatólogo durante el duelo para minimizar su sufrimiento.
"Cuando hay un duelo, las personas sufren, entonces el trabajo del tanatólogo es acompañar a la persona a que minimice su sufrimiento", asegura Estuardo Valdez, Director educativo de la Asociación Integra.
El profesional de la psicología relata que se debe conocer en que etapa del duelo se encuentra la persona, puesto que podría ser que la persona esté evitando la pérdida conocido como proceso de evitación.
Posteriormente, llega el periodo de asimilación, en donde la persona asimila la pérdida y llega un duelo emocional y sucede entre dos días y de dos a tres meses después del fallecimiento, asevera Valdez.
Finalmente, llega el periodo de adaptación en donde las personas se adaptan a continuar con la vida a pesar del duelo.
¿A dónde acudir?
El costo promedio por una sesión en terapia psicológica va desde los Q250 en adelante, con profesionales en clínicas privadas.
Sin embargo, quienes estén interesados pueden recibir terapias a bajo costo en la Liga de la Higiene Mental por un costo de Q120 por cada sesión que puede ser virtual, presencial o por llamada telefónica.
También en el Centro de Asistencia Social (CAS) de la Universidad Panamericana y en la Unidad Popular de Servicios Psicológicos de la Universidad de San Carlos de Guatemala.
Así como en la Asociación Ángeles de Batas Blancas, que presta un servicio de psicología a través de videollamadas por un costo de Q75 por cada sesión.
