Guatemala se ha vestido de luto con la impactante noticia del reciente fallecimiento de Yeyson Randolfo Chen Sacul, de tan solo 5 años, el niño petenero que según la investigación en proceso, podría haber muerto a causa del bullying.
Benedicto Valle, director departamental de Educación, confirmó que el incidente fue provocado por compañeros de la misma edad del pequeño y que, por esa razón, se integrará una comisión para atender también a los compañeros del menor fallecido y los padres de familia. Es decir, es un caso donde se llegó a la consecuencia más grave del acoso escolar.
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Para Yeyson Chen, desgraciadamente, es muy tarde, pero hay miles de niños más que sufren en silencio día a día y como sociedad les debemos salvar.
Debido a esta alarmante noticia, Soy502 consultó a la comunicóloga experta en bullying, Trixia Valle, y nos habló de este flagelo que ataca a casi todos, sin importar género, edad, condición social o económica y puede destruir vidas.
En el libro “Sufro bullying y ¡ya no quiero ir a la escuela!”, esta experta mexicana detalla que el bullying se refiere a todas las formas de actitudes agresivas, intencionadas y repetidas que ocurren sin una razón clara, adoptada por uno o más estudiantes contra otro u otros.
Según la experta, siete de cada 10 niños sufren de acoso escolar. Los ataques pueden comenzar incluso desde los 5 años, y de no ser controlado, puede terminar en fatalidades como el suicidio o el asesinato.
¿Cómo detener el bullying?
Lo primero es tomar conciencia del entorno violento del niño o adolescente y, por supuesto, actuar.
Vivimos en una época de permisividad en la que todo es posible, en la que los límites y las normas se transgreden muy fácil, y en la que los padres y las instituciones han perdido su imagen de autoridad.
Pero alguien debe poner límites, y la primera institución que debería poner orden en la vida de cualquier persona son los padres, la familia y ellos a su vez regirse por los valores. No es culpa del gobierno, a los niños se les educa en casa antes, durante y después de pisar la escuela.
Una manera de sacarlos del ciclo y la influencia del acoso es revisando lo que ven en televisión, en Internet y los videojuegos que tienen (eliminando los violentos), así como procurar que, por lo menos, antes de los 12 años estén libres de noticias violentas o imágenes perturbadoras.
Quitar el miedo
No se debe alimentar el miedo ni la ansiedad en los pequeños. Es mejor evitar que escuchen hablar (a los adultos) sobre crímenes o secuestros, pues los niños, al no saber manejar la ansiedad o el temor que estos temas les provocan.
Ellos producen en sus entornos las conductas negativas y así el niño que es atacado también podría atacar a otros, por lo que se hace una cadena sumamente destructiva en la sociedad. Claro ejemplo son los niños que juegan a ser mareros, narcos o criminales de videojuegos.
Claro está que no se debe ejercer violencia en ellos, de lo contrario solo la replicarán. Esto implica evitar los golpes y cambiarlos por límites claros, respetuosos y efectivos.
Disciplina
Trixia señala que no debe existir miedo al momento de mostrar autoridad y ser firmes en las órdenes, reglas, límites y consecuencias, ya que todos las necesitamos.
¿Cómo detectar a un niño que sufre de acoso escolar?
A un acosador se le detecta más fácilmente. Por lo general es agresivo, no respeta las normas, viste de forma descuidada y no sabe controlar sus emociones. Eso sí, tiene cierta fascinación por generar miedo. Sus síntomas son "más ruidosos".
Por su parte un niño que es acosado los síntomas son silenciosos. El niño víctima usualmente no mira a los ojos, tiene miedo, se joroba y maltrata a su vez a niños más pequeños o animales domésticos. Luce triste o irritable, y presenta ligeros trastornos alimenticios y de sueño.
Seguramente no querrá ir a estudiar o prefiera cambiar de colegio. En casos de violencia física, tendrá golpes, cortadas o moretones frecuentes. Sin importar si el daño es psicológico o ya llega a lo físico, siempre es importante estar alertas y actuar para protegerlo.
Espiritualidad y valores
La ausencia de estos elementos es caldo de cultivo para la violencia y las crisis social que vivimos. La desesperanza y la depresión son las que toman el control de los niños abusadores.
La conferencista señala que el 38% de los valores los enseñan los medios de comunicación y no la familia, y que los valores que nos destruyen principalmente son el exceso en libertad, la permisividad y el abuso de la libertad de expresión.
Desde su experiencia propia, la autora indica que la esperanza es la que sostiene los sueños, y son los padres los que deben generarla en los hijos antes de que sean manipulados por su entorno.
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¿Quién es Trixia Valle?
Es una comunicóloga con Maestría en Educación para la Paz, experta en valores y prevención de bullying, autora de 11 libros, dos best-sellers, entre ellos “Mamás Millennial” y “Ya no quiero ir a la escuela”, quien se ha dedicado por 17 años a transmitir valores universales al contexto millennial, siendo una reconocida influencer de valores en diversos medios de comunicación y redes sociales.
Actualmente está en Guatemala y da talleres contra el bullying en empresas, instituciones y colegios. Trabaja en conjunto con GuatEd, una empresa comprometida a multiplicar valores.
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