Edgar Saúl Hernández Reyes murió de forma violenta en octubre de 2009. Luego de fallecer, una agrupación criminal registró más de 900 armas de fuego a su nombre.
El uso de este hombre no fue casualidad, Hernández Reyes era el propietario de la empresa Seguridad 24, quien contaba con la papelería necesaria para brindar seguridad privada, comprar armas y registrarlas.
Todas las armas fueron registradas por esta estructura en la Dirección General de Armas y Municiones (Digecam) con documentos falsificados, de acuerdo con la Fiscalía Contra el Crimen Organizado.
La organización delincuencial también utilizó procedimientos ilegales para apropiarse de la empresa de Hernández Reyes. Esto con el fin de seguir presentando servicios de seguridad privada y obtener recursos económicos.
Una de las personas que estaba detrás de este enredo ilegal es María Teresa Soto González, señalada de ser la cabecilla de la estructura, pues ella se hizo de un mandato falso para controlar Seguridad 24.
Una de las evidencias del caso es justo este mandato, el cual fue obtenido por Soto González en 2011, dos años después del fallecimiento de Hernández Reyes, el dueño de la compañía.
Allanamientos
La PNC realizó un inmenso operativo en el que utilizaron 1 mil 700 agentes para dar cumplimiento a 387 allanamientos. Esto se hizo con el objetivo de controlar las operaciones de la empresa Continental Security ya que prestaba servicio a empresas de todo tipo y zonas residenciales.
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Los allanamientos que más llamaron la atención de los guatemaltecos fueron los realizados a una cadena de farmacias. La PNC decomisó las armas de a mayoría de guardias de seguridad ya que se registraron de forma fraudulenta.
Otro señalamiento
Soto González también planificó y ejecutó la compra venta de 209 armas de fuego usando a Seguridad 24 como fachada. Estas tenían un valor de 41 mil 800 quetzales, según la fiscalía.
En ese negocio también participó la empresa Shield Segurity, la cual era propiedad de Agustín Carmelino López Alvarado.
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Los detenidos fueron: Jorge Mario Hernández Huertas, Mario Rolando Palacios Meléndez, Marleny Consuelo Morataya, Juan Ramón Ferro Herrera, Edgar Orlando Guzmán Socop, Jorge Adolfo Samayoa Rosales y Juan Carlos Berlus Díaz.
Estas personas fueron capturadas junto con Soto durante los 368 allanamientos ejecutados en departamentos como Alta Verapaz, Baja Verapaz, Chimaltenango, El Progreso, Escuintla y Guatemala.
Investigan asesinato
La PNC investiga el crimen contra Hernández Reyes, asesinado en 2009 y propietario de la empresa Seguridad 24. Las autoridades sospechan que Soto González, la líder de la estructura, fue quien coordinó el crimen, pues era pareja sentimental de la víctima.