El vicepresidente Alejandro Maldonado le concedió una entrevista a Canal Antigua, durante la cual reiteró que no va a solicitar la renuncia a Otto Pérez Molina porque "no sería elegante", ya que quien se beneficiaría de esa dimisión sería él mismo.
Afirmó, enfático, el vice mandatario: "No quiero pasar a la historia con el título de traidor o de cobarde". Con esa posición, según él, será recordado como alguien que comprendió las protestas y demandas de la sociedad, pero que no le puso zancadilla al presidente para heredar su cargo.
El vicepresidente dijo que la histórica manifestación del 27 de agosto de 2015 llevó un mensaje importante, que debe ser tomado en cuenta, pero que el mandatario Pérez Molina tiene "ojos y oídos", dando a entender que el presidente puede ver y escuchar las demandas de la sociedad, sopesarlas y decidir un curso de acción.
Maldonado también recordó haber participado en una protesta de dimensiones similares, para exigir la renuncia de la Corte Suprema de Justicia, cuando él era adolescente. Recalcó que en aquella oportunidad la manifestación se disolvió a balazos y bombas de gas. A decir del Vicepresidente, el respeto a la protesta ciudadana observada hoy marca una diferencia.
Cuestionado sobre el estado de sus facultades, ya que los propios periodistas de los noticieros de Canal Antigua habían adelantado que el vice mandatario podía sufrir Alzheimer, Maldonado dijo que él se encuentra perfectamente y que incluso revisa él mismo todos los días su correspondencia. También indicó que además de producir los escritos jurídicos que ha hecho siempre a lo largo de su vida, ahora ha incursionado en nuevos géneros y escribe cuentos de terror.
