Las hermanas Gisela y Jackeline Ramírez empezaron hace tres años un proyecto que buscaba conciliar el diseño, la madera y la óptica. El resultado fue la empresa Wäch, dedicada a la fabricación de lentes artesanales de madera.
Los productos de Wäch van más allá de una innovadora propuesta estética. Elaboran sus productos con los retazos y las piezas pequeñas de madera que son desechadas por los aserraderos. “Nos preocupada que en promedio el 30% de la madera en un aserradero se desperdicie”, comenta Gisela Ramírez.
Usualmente toda este material no empleado por las empresas madereras sería quemado. No obstante Wäch espera contribuir a reducir el desperdicio y la emisión de carbono innecesaria.
Piezas de arte
“El proceso empieza cortando tres planchas de madera”, explica Gisela. Estas se pegan para formar una única pieza que será el marco de los lentes. “Luego de es cuando empieza el verdadero trabajo artesanal en cada pieza”, resalta la fundadora de Wäch.
Cada par de lentes es cortado y lijado a mano. Cuatro artesanos de San Juan Sacatepéquez y San Lucas Sacatepéquez son los encargados de darle los acabados correspondientes al cuerpo y las patas de los lentes. Los lentes también son cortados a mano y se acomodan con precisión sobre el cuerpo. Se ensamblan todas las piezas.
La mejor garantía que puede extender Wäch no es la calidad de las maderas que utilizan, las cuales son coste, cedro, palo blanco y roble. Tampoco son las certificación con las que cuentan los marcos de resistencia y ser hipoalergénicos. Es que el resultado final es una pieza única.
Identidad
Wäch, aunque fonéticamente podría relacionarse con el verbo en inglés ‘watch’, que se traduce al español como ‘ver’, en realidad el nombre tiene raíces muy guatemaltecas. “Wäch en Kakchikel significa ‘ojo’” explica Gisela. “Somos una marca orgullosamente guatemalteca”, dice.
Las hermanas trabajaron de la mano de artesanos por tres años para desarrollar las finas piezas de madera. Aprendieron sobre distintos tipos de madera y las técnicas adecuadas para trabajar la madera.
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“Fue una experiencia de aprendizaje mutuo. Mientras nosotros aprendíamos de ellos el arte de tallar la madera, ellos aprendieron de diseño”, explica Jackeline.
Su productos se podrán adquirir en ópticas en zona 10 a partir del mes de octubre, sin embargo a partir de ya se pueden hacer pedidos por medio de su pagina de facebook. Actualmente los lentes toman aproximadamente cinco días en estar terminados y tienen un costo de entre 100 y 150 dólares dependiendo del modelo.