El alcalde capitalino, Álvaro Arzú, murió este viernes en horas de la tarde, mientras se encontraba jugando golf en el Club Campestre San Isidro en la zona 16 capitalina, tal y como Soy502 adelantó minutos después que ocurrió.
Cayó en el hoyo 9, el más cercano al lobby del club y aunque testigos intentaron reanimarlo fue imposible.
Uno de esos testigos relató al portal de noticias Publinews los difíciles momentos que se vivieron tras el infarto del jefe edil.
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"Álvaro Arzú estaba jugando golf cuando se desplomó, tuvo un infarto fulminante. Yo estaba en cercanías y en menos de cinco minutos estaba junto a él, pero estaba muy mal, tratamos de reanimarlo", indicó Stephan Preuss.
Según el testigo, le dieron asistencia cardio respiratoria durante aproximadamente 20 minutos, pero no hubo una respuesta positiva.
“Llegaron los bomberos y luego se lo llevaron al hospital El Pilar. Les dije lo llevaran al hospital más cercano, pero realmente estaba muy mal. Esos infartos son fulminantes y cuando son así, hay muy poco por hacer”, relató Preuss.
De acuerdo con Preuss, cuando Arzú cayó al suelo ya no pudo hablar ni pedir nada. "El corazón nunca respondió adecuadamente", explicó el testigo.
Preuss aseguró que cuando iban en la ambulancia intentaron reanimar a Arzú con un desfibrilador, pero los signos no mejoraron, al llegar al hospital hicieron la misma maniobra, pero sin resultados.
“Simplemente son cosas que pasan, es devastador, estamos bastante afectados porque se hizo todo lo posible para salvarle la vida, pero no se pudo”, indicó.
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