Usaron su toga, les compraron un anillo como reconocimiento por haber culminado sus estudios de diversificado, los felicitaron y ahora se preparan para entrar a la universidad o unirse a la población trabajadora. Pero, ¿están los recién graduados preparados para enfrentarse a la nueva etapa?
El Ministerio de Educación (Mineduc) dio a conocer los resultados de las evaluaciones de matemática y lectura que realizó a los estudiantes que se graduaron el año pasado. Los resultados fueron poco alentadores. Sólo 11 de cada 100 estudiantes fue satisfactorio o excelente en matemática.
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La lectura tampoco es su fuerte. Aunque muchos más aprobaron, sólo 3 de cada diez jóvenes obtuvo una calificación satisfactoria o excelente.
Para realizar la evaluación el Mineduc pasó la prueba a 158,161 jóvenes que estaban a punto de graduarse en todo el país en establecimientos públicos, privados, municipales y por cooperativa de, entre 16 a 21 años.
Del total de los evaluados, el 33.83%, es decir, casi 4 de cada 10 alumnos aseguró que trabaja para apoyar económicamente a su familia, además el 26.47% reconoció haber repetido algún grado en el nivel primario.
Durante la evaluación se logró detectar cuáles son los departamentos que requieren poner más atención en la educación de sus estudiantes. Por ejemplo, mientras que Guatemala y Chimaltenango lograron los puntajes más altos, los jóvenes de Jutiapa y Santa Rosa reflejaron que sus conocimientos están muy por debajo de la media.
¿Pueden resolver problemas?
Según los resultados de las evaluaciones de matemática. Los graduandos mostraron más habilidades en el pensamiento matemático con un 41.96% de satisfacción, pero se les dificulta un poco más lo relacionado con definiciones y cálculo (38.30%) y con la resolución de problemas (36.14%).
Además, demostraron tener más capacidades en lo relacionado con la matemática comercial y la estadística, pero tienen problemas con el álgebra y la geometría. De acuerdo con el subdirector de Análisis de Datos Cuantitativos de la Dirección General de Evaluación e Investigación Educativa del Mineduc, Edgar Montúfar, estos resultados reflejan que los jóvenes tienen más capacidades en lo cotidiano. "Utilizan la matemática comercial en sus qué haceres diarios", detalló.
Mientras que en el ámbito de lectura, los graduandos fueron más capaces de deducir lo que estaban leyendo; pero reflejó que tienen un nivel bajo en las habilidades relacionadas con la crítica, así como en la estrategia de comprensión de lo que están leyendo.
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