Siete dudas acerca de los actos vandálicos en la protesta del sábado

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El Congreso ardía. El fuego consumió decenas de documentos históricos. Hasta el momento, no ha habido un pronunciamiento de las autoridades legislativas.

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Durante varios minutos el Congreso prendió en llamas. Supuestos manifestantes realizaron pintas y quemaron parte de los ventanales y la oficina de la Dirección Legislativa. Y poco faltó para que el fuego llegara a la parte interna del Palacio Legislativo. 

Desde un día antes se anunció que el Congreso estaría cerrado y preveía que habría disturbios, incluso el Dirección General lo hizo saber a través de un oficio, pese a ello, la seguridad en el edificio y sus alrededores era mínima. Esto y varias cosas más, han generado dudas en torno a los hechos vandálicos, ocurridos durante una manifestación pacífica.

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Diputados de la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE) denunciaron que hubo "infiltrados" y que tienen indicios de que el Gobierno contrató a supuestos pandilleros para llevar a cabo los destrozos. Además, varias personas han publicado sus dudas en las redes sociales y aquí enumeramos algunas de ellas.

1. Poca seguridad

El jueves 19 de noviembre, por la tarde, hubo una manifestación frente al Congreso. Ese día hubo barricadas y varios agentes de la Policía Nacional Civil (PNC).

Las autoridades del Legislativo previeron que el sábado 21 de noviembre habría disturbios por las manifestaciones e informaron que el Palacio Legislativo estaría cerrado, a través de la circular 005-DG-2020. Incluso indicaron que se tomó esa decisión "como medida de resguardo al Patrimonio Cultural".

Sin embargo, no hubo cordones de seguridad ni bloquearon varias cuadras, como en otras ocasiones. En su lugar, pocos agentes de la PNC resguardaban el área cuando llegaron los supuestos manifestantes, y tampoco actuaron en el momento en que se realizaban los actos vandálicos.

En las redes sociales circulan fotografías donde se observa que los agentes de la PNC no actuaron contra los manifestantes. (Foto: Twitter)

2. ¿Fuego provocado?

Circularon varias fotografías del interior del Congreso, en las que lucía preparado para el fuego desde antes que fuera incendiado. Había varios extintores cerca de la puerta principal y las ventanas que fueron quebradas. También se observan toneles con mangueras. 

Pese a que las puertas fueron abiertas por los presuntos protestantes prácticamente sin esfuerzo, se ve que habían cuñas para impedir el ingreso y estas no tenían los candados que se colocan habitualmente en las puertas. ¿Cómo lograron los manifestantes vencer las cuñas y quitar los candados en tan poco tiempo, y sin ser detenidos?

Varias personas, con características militares, esperaban en los alrededores del Congreso y fueron captados en fotografías que se han publicado en las redes sociales.

Algunas personas, incluso, han puesto en duda la forma en que se originó el fuego. Este pareciera empezar desde adentro, donde supuestamente estaban colocados los extintores y toneles.

3. ¿Una crónica anunciada?

El viernes 20 de noviembre, un día antes de la manifestación pacífica frente a la Plaza de la Constitución, la PNC emitió una serie de mensajes en las redes sociales donde pedía "denunciar a los antisociales que quieran crear disturbios", como si supieran que algo iba a pasar.

Mientras que, casi una hora después de la convocatoria oficial para realizar la manifestación en la Plaza, el presidente Alejandro Giammattei amenazó con "todo el peso de la ley", a las personas que "vandalizaran" en contra de la propiedad privada o pública. Horas después, la zona 1 se convirtió en un campo de guerra.

4. ¿Sin armas?

A eso del mediodía del sábado, la PNC informó que estaba protegiendo el patrimonio público y privado sin portar armas y colocaron una fotografía de los agentes apostados frente al Palacio Nacional de la Cultura, donde se empezaba a concentrar la manifestación pacífica.

Sin embargo, más tarde Emisoras Unidas en una transmisión en vivo, logró captar el momento cuando los agentes de la PNC sacan de una alcantarilla ubicada en una esquina cercana al Congreso, una gran cantidad de armamento que usaron en contra de los manifestantes.

¿Por qué escondían los agentes armas dentro de una alcantarilla y por qué estaba ubicada cerca del Congreso? El ministro de Gobernación, Gendry Reyes, aseguró durante un mensaje transmitido el sábado por la noche, que los agentes no tenían armas.

5. Supuestos infiltrados

Otra de las dudas que han surgido en las redes sociales es ¿cómo un civil puede obtener una bomba lacrimógena, si es de uso exclusivo de las fuerzas de seguridad? ¿Cómo puede utilizarla? ¿Quién le enseñó? ¿Por qué la PNC tiene un video del momento justo en el que un "bochinchero" acciona y lanza la bomba? Si lo grabaron, ¿por qué no lo detuvieron en flagrancia?

6. Atacaron la manifestación pacífica

Mientras varios disturbios se desarrollaban frente al Congreso, cientos de personas, familias con niños y adultos mayores realizaban una manifestación pacífica en la Plaza de la Constitución. Allí no habían personas alterando el orden.

Sin embargo, las fuerzas de seguridad llegaron y lanzaron bombas lacrimógenas contra los manifestantes en la Plaza. El usuario Gustavo Marroquín publicó un video en el que se observa el momento en que las fuerzas de seguridad dispersan la protesta pacífica. 

Varias personas resultaron afectadas. Adultos mayores y niños fueron captados con severos daños en los ojos debido a las bombas. ¿Por qué atacar a la población que actuaba de forma pacífica?

7. ¿Violencia policial?

Luego de los disturbios, decenas de personas denunciaron violencia policial, hecho del que ninguna autoridad de Gobierno se ha manifestado.

En numerosos videos y fotografías se observa cómo eran arrastrados los manifestantes. No respetaron género, mujeres y jóvenes eran jalados por agentes que les duplicaban el peso y tamaño.

También hubo videos en donde los agentes dispersan a las personas en la zona 1 lanzando agua a presión. No importaba si habían estado en la manifestación o no. Se les observó golpear a la gente con sus macanas, sin mayor explicación ni justificación.

Los periodistas también fueron atacados. Uno de ellos fue el fotógrafo independiente, Carlos Sebastián, quien fue golpeado por un agente de la PNC, con una macana, en la cabeza, cuando trataba de documentar un arresto.

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